Experiencias de Peregrinos

Muy positivo, el Camino es encatador.

El camino no solo me ha gustado, sino que me ha enganchado, es una experiencia distinta en cada camino, que todo el mundo debería de vivir alguna vez en la vida.

La experiencia es única. Me cambió la forma de encarar la vida. Borró parte de mis miedos. Me dió confianza en mi misma.

Lo valoro como una experiencia única en mi vida, especial, maravillosa y muy, muy intensa.
El camino te marca para toda la vida, el primer año lo realicé con mi ex novia, tras cinco años saliendo lo dejamos y yo lo estaba pasando mal, muy mal. Una amiga me dijo que hiciese algo en mi vida y que necesitaba pensar, necesitaba encontrarme a mi mismo y se le ocurrió que porqué no hacía el camino de Santiago. Desde un principio me entusiasmó la idea. Se lo comenté a amigos y amigas entre las que se encontraba mi entonces ex novia. La cual me dijo que le gustaría hacer el camino conmigo....

Me ha gustado. Es una experiencia maravillosa, te engancha. Haga el tiempo que haga (viento, lluvia, calor, frío...).

Mucho, muy positiva. El silencio, la acogida de la gente...

Experiencia vital totalmente recomendable, de hecho volví al año siguiente.

Este es el cuarto año que realizo parte del Camino de Santiago, dos años hicimos desde Sarria a Santiago, el pasado desde Piedrafita a Santiago y este año empezamos en Roncesvalles hasta Logroño. Caminamos mi marido y yo, a él no le gusta mucho el senderismo, el primer año vino por acompañarme y no dejarme sola, y desde entonces, es el primero que cuando llegan las vacaciones, quiere volver a hacer parte del Camino. Es una experiencia única, después de todo el año trabajando, este caminar es como una cura, una desintoxicación de todo lo acontecido durante el año, es una recarga de pilas,...

Muy positiva, me gustó mucho, volveré en marzo de 2014 desde Burgos hasta donde llegue.

Es muy emocionante y enriquecedor hacerlo, por disponibilidad de tiempo vamos haciendo una semana al año y ya esperamos con ansia el próximo.

La experiencia no puede ser más positiva y reconfortante. Cada tramo, cada pueblo, cada albergue y cada peregrino con el que hablas quedan para siempre en tu memoria. Lo he hecho dos veces y ya estoy planeando la tercera, en esta nueva ocasión el del Norte.

Experiencia única, digna de ser hecha al menos una vez en la vida. Treinta días de caminar por España, por la Edad Media y por dentro de mi propia cabeza. Ser parte de una actividad milenaria y oportunidad de desprenderme de todo lo superfluo.
Como cosa divertida: No esperaba que hacer el Camino descalzo me convirtiese en la "novedad del año", yo suponía que era poco usual, pero no TAN inusual. Los reportajes en los diarios me transformaron de rareza en celebridad :-)
Algo a destacar: la notable sorpresa que representa encontrase con la "Fuente de Irache" ¡Qué buen vino!