La ropa: para la lluvia, el frío y el calor

Dos mudas para andar y otra para después de la ducha es suficiente. En épocas de calor, las camisetas térmicas de verano son mejor que las clásicas camisetas de algodón, pues son muy ligeras, transpirables y no retienen la humedad. En invierno es necesario llevar ropa de abrigo, y en verano no debemos olvidar llevar un polar delgado.

Para la lluvia. La mayoría de los caminantes llevan una capa impermeable (el conocido poncho) que también cubre la mochila, pero resulta incómodo si sopla el viento. Una buena alternativa es llevar una chaqueta y unos pantalones impermeables, y un protector impermeable para la mochila. Incluso es una buena idea llevar un pequeño y ligero paraguas.

Para el sol. Es imprescindible llevar un sombrero o una gorra con visera y crema de protección solar.

Para el frío y el viento. Además de la ropa adecuada, no debemos olvidar llevar alguna prenda para proteger la cabeza. Según la época del año, también llevaremos bufanda y guantes

Poncho para la lluvia

Ponchos impermeables

A los peregrinos nos gustaría que siempre brillara el sol y nos acariciara una suave brisa… pero a veces llueve, y como no vamos a detenernos por ello (excepto en caso de tormenta o lluvia torrencial) debemos llevar el equipamiento adecuado para afrontar esta habitual circunstancia. La mayoría de los peregrinos optan por el poncho impermeable, que protege completamente la mochila y la mayor parte del cuerpo. La gran virtud del poncho es la ya dicha, que protege de forma muy efectiva la mochila, y además es fácil de poner y de quitar. Sus inconvenientes son que no protegen las botas ni la parte baja de los pantalones, y si sopla fuerte el viento resulta algo incómodo. Otros peregrinos optan por la chaqueta y pantalón impermeable, y protegen la mochila con su cubremochilas. Resulta más cómodo y elegante que el poncho, pero tiene el gran inconveniente que, si llueve mucho, el agua se desliza irremediablemente entre la espalda y la mochila, y termina filtrándose en ésta. En este caso siempre debemos tener protegido el saco de dormir dentro de una bolsa de plástico y, por supuesto, el móvil, la cámara de fotos y cualquier otra cosa susceptible de dañarse con la humedad.

Los ponchos impermeables se venden en la mayoría de tiendas de deporte, y también en muchos lugares del propio Camino Francés.