Nueva estación de autobuses en Santiago

La obra de la Intermodal ha sido firmada, si bien con notables modificaciones sobre el proyecto inicial, por el estudio del arquitecto Juan Herreros. Entre los elementos que más sobresalen, dentro de una concepción funcional y de amplios espacios, está la enorme pasarela en cajón que desde la Rúa do Hórreo se extiende hasta la estación de autobuses, abriendo una nueva fachada hacia el barrio de Pontepedriña, lo que supone una notable transformación urbana.

Al haberse optado por respetar el céntrico emplazamiento de las estaciones, todo un acierto que evita largas conexiones (como ejemplo recordemos el caso de Burgos), los viajeros seguiremos accediendo al centro con facilidad y rapidez: tan solo 10 minutos a pie hasta el casco antiguo, y 15 minutos hasta la catedral. Asimismo, los autobuses al aeropuerto pararán en la nueva terminal, y la mayor parte de las líneas urbanas también lo harán al frente de las estaciones, en la plataforma superior de la Rúa do Hórreo.

La vieja estación de autobuses, situada al norte de la ciudad, será demolida en breve, y en su lugar se alzará un edificio administrativo de la Xunta de Galicia.

En cuanto a la nueva estación del tren, salvados ya el viejo edificio en piedra, y su monumental escalinata neobarroca, que se pretendían destruir en aras de la funcionalidad generando una gran protesta ciudadana, está previsto que sea concluida en 2023.