Etapa 2: Penacova - Mortágua | Recorrido

Desde el acceso a Penacova un camino de tierra desciende de nuevo a la N110 y cruza el Mondego para desembocar en la N2. Tras la gasolinera y el hospedaje Lampião, una senda coincidente con el GR-48 se acerca al río. Avanzamos entre huertas, vegetación ripícola y atravesando una alameda a la altura de Vila Nova (pueblo en la carretera); en la orilla opuesta vemos la planta embotelladora de aguas de Penacova.

Tras pasar bajo un viaducto del IP3, que se nos echa encima, subimos a la N2 hasta el mirador, dispuesto en unas pasarelas de madera, sobre la hermosa formación geológica de la Livraria do Mondego.

2,8 Mirador de la Livraria do Mondego. Enseguida regresamos al camino fluvial. Éste se abre paso entre las estrechas franjas, en su día intensamente cultivadas, que se extienden desde la nacional, y el arbolado de galería que acompaña al río, en esta zona mayormente compuesto por acacias y junqueras.

La llegada por el sur del río Alva, nos obliga a volver a la nacional para cruzarlo, a la vista de una pequeña presa, pero 150 m después volvemos al camino del río a través de una desdibujada senda entre fincas: discurre sobre un muro y, más tarde, por una pasarela de madera, para proseguir por una zona en la que el fuego ha dejado campo libre a eucaliptos y acacias. Un descampado final antecede a Raiva, a donde llegamos por su parque y subiendo a la N2 (fuente).

4,3 Raiva.

Aquí el Mondego traza varios meandros, tan cerrados que casi se estrangulan, resultando preciso rodear el primero en altura. Desde el enlace de la N2 con el IP3, la N17-2 y el IP6, en el lugar del Alto das Lamas (bar), nos apartamos del eje viario motorizado, y del GR-48, para dirigirnos a la aldea de Coiço. Una capillita acoge unas alminhas en las que San Miguel mata a un diablo con forma de Covid, ¿un presagio o la obra de un pintor con poco oficio?

2,5 Cruzamos ahora el Mondego por la presa o barragem de Coiço. A los 250 m tomamos una pista asfaltada más próxima al río que sube primero, y luego desciende la vaguada donde se sitúa Gondelim. Para entrar en el pueblo se cruza un regato, con un tramo de tierra, y se vuelve a ascender hasta la iglesia. Hay dos cafés con tiendas bien surtidas.

1,4 Gondelim.

Al final de la localidad, por la Rúa das Barrelas tomamos la carretera señalada a Vale da Ana Justa y Mortágua. El Camino avanza por un pequeño valle ocupado por frondosas, olivos, viñedo, pinos y eucaliptos. Un alto marca la divisoria entre los distritos de Coimbra y Viseu, esto es, entre la Beira Litoral y la Alta.

El primer pueblo del municipio de Mortágua es Cercosa, en el que nos introducimos por la Rúa Principal. Cuenta con bares, tienda y varias fuentes, una de ellas en un parque, la segunda junto a la iglesia, que posee torre de remate bulboso.

En un primer momento se toma la dirección de Alcordal (Rúa da Serra de Figueiras), pero tras las últimas casas se gira a la derecha por un camino de tierra entre cultivos y olivares. Tras 500 m vuelve el asfalto en la aldea de Galhardo (fuente y área de descaso con sombra).

Principia aquí otro camino carretero que transita por un atractivo paisaje mediterráneo, y a los 1.000 m desemboca en la carretera que lleva a Marmeleira, con un gran taller de aluminios en el centro.

2,8 Acceso a Marmeleira. La encrucijada del núcleo carece de la debida señalización, pero lo lógico es seguir hacia Mortágua, ahora en subida por la vecina aldea de Benfeita.

2,0 Benfeita. Una larga bajada entre olivos, sin apenas indicadores, nos lleva por la M591 hasta Cortegaça, a donde accedemos por la Rúa da Igreja. El Camino da un considerable rodeo para pasar por el templo dedicado a Santiago, donde ha sido dispuesto un panel del Caminho Natural da Espiritualidade.

1,1 Cortegaça.

Rodeamos la pequeña iglesia para volver a la misma carretera unos metros más adelante del desvío, con Mortágua a la vista en el fondo del valle. La cruzamos para seguir al frente por un monte de coníferas, siempre en línea recta hasta encontrar la bajada pedregosa, en zigzag, que conduce a Vale de Açores. 

Primero tomamos a la izquierda una carretera local, 500 m, luego a la derecha ya entre casas. Pasamos ante el gran campo de la feria y la capilla de Santo António enfilando la adoquinada Rúa Dr. Bráulio Afonso de Sousa, de pobres casas, algunas de piedra con su patín y barandas de madera.

Ante la Quintinha da Madalena por la Rua Teófilo de Abreu, llegamos a una explanada con el gran supermercado A Feira, pasando por un puente sobre la vía férrea para acceder al Parque Verde da Ponte (bar en el Centro BTT).

Una senda sigue al borde del río hasta alcanzar el Parque das Nogueiras. Desde aquí se accede, fuera de ruta y cruzando otro pequeño parque (fuentes), al centro de Mortágua, distando la Praça do Município tan solo 200 m.