Etapa 20: Mansilla de las Mulas - León | Al Loro
Etapa poco interesante paisajísticamente; se siente la presencia cercana de una gran ciudad, aunque en algún tramo aún podemos disfrutar de una cierta soledad. | |
Todas las localidades cuentan con servicios de restauración. | |
Una variante señalizada, que arranca a la salida de Mansilla de las Mulas y termina en Villamoros de Mansilla, permite visitar el magnífico monasterio cisterciense de Santa María de Sandoval. Alarga el recorrido en 5,5 km. Más info en: Monasterio de Santa María de Sandoval, una visita excepcional |
Sobre León: | |
Para adquirir la credencial (la general o la específica del Camino del Salvador): la entregan en el albergue de Las Carbajalas, en la plaza Santa María del Camino; también la podemos recoger en otros albergues de la ciudad, así como en la sede de la Asociación Pulchra Leonina de Amigos del Camino (avenida Independencia, 2, de lunes a viernes de 11:00 a 13:00 y de 18:00 a 20:00). | |
Cada tarde, desde mediados de junio a finales de septiembre, se celebra Misa del Peregrino a las 19:00 (domingos y festivos a las 19:30) en la basílica de San Isidoro, con bendición a los peregrinos. | |
Hay dos albergues públicos, ambos céntricos y de gran capacidad: el más tradicional sería el albergue de las monjas Carbajalas (como se le conoce), de carácter religioso, con el inconveniente que cierra sus puertas hacia las 21:30 o 22:00, fatal para los que quieran salir a tomar algo por el Barrio Húmedo; también tenemos el albergue-residencia San Francisco de Asís, de la Fundación Ademar, con unos horarios más relajados y habitaciones menos apretadas. | |
Los tres monumentos más destacados son: la extraordinaria Catedral de Santa María de Regla, del siglo XIV, probablemente la catedral gótica más bonita de España; la basílica de San Isidoro (siglos XI y XII), cuyo Panteón Real es conocido como la Capilla Sixtina del románico; y finalmente el convento de San Marcos (siglo XVI), joya del plateresco que en su día fue hospital de peregrinos, hoy reconvertido en hotel-Parador de lujo (visitas gratuitas de su museo e iglesia). | |
El nombre de la ciudad no tiene nada que ver con el rey de los felinos: en realidad es una evolución del latín legio (legión), pues aquí instalaron su campamento definitivo la Legio VI Victrix y su sucesora la Legio VII Gemina, ejércitos romanos que controlaron esta zona a partir del siglo I a.C., tras la guerra contra cántabros y astures. Es muy interesante visitar el Centro de interpretación del León romano (la entrada es gratuita), situado en la Casona de Puerta Castillo, junto a uno de los accesos de la antigua muralla. | |
Además de disfrutar de la gastronomía local, en la ciudad abundan las tiendas de productos típicos, especialmente alrededor de la plaza Mayor y la plaza San Martín, en el Barrio Húmedo; en ellas podremos adquirir alimentos envasados aptos para llevar en la mochila, tales como la cecina, un embutido ahumado que se elabora a partir de los cuartos traseros de la vaca, el chorizo en sus variantes dulce, agridulce o picante, y el queso Valdeón, de pasta azul y sabor intenso. | |
La calle Ancha, que conduce a la catedral, separa las dos zonas más conocidas de tapeo: El Barrio Húmedo, al sur, y el Barrio Romántico, al norte. Aquí cada bar suele contar con su propia tapa estrella, que a menudo les da nombre y que casi siempre es gratis, pues va incluida en el precio de la bebida. | |
Los miércoles y sábados se instala en la plaza Mayor el mercado semanal, donde acuden agricultores con hortalizas y algunos productores de embutidos y quesos. También podemos encontrar frutos secos. |