Etapa 1V: A Gudiña - As Vendas da Barreira | Al Loro

Distancia: 
18,5 km
Duración: 
4 h 30 min
Dificultad: 
3
Paisaje: 
3

En la pequeña Praza Maior (con cruceiro) encontramos bien señalizada una importante bifurcación: los peregrinos a pie suelen optar por Laza, a través de A Serra Seca, un camino más montañoso, mucho más solitario y aproximadamente 26 kilómetros más corto; la opción por Verín sigue el eje de la nacional N-525, y pasa por ciudades de relevancia histórica como Verín o Allariz. Para más información, podéis leer el artículo de Antón Pombo: El dilema de A Gudiña.

Partir el trayecto entre A Gudiña y Verín parece obligado por la distancia (son 39,7 km), pero en As Vendas da Barreira no hay albergue, tan solo un hostal. Luego, hasta Verín solo disponemos de un hotel en Fumaces (son 10,4 km más).

Con la construcción de la autovía de las Rías Baixas, la nacional N-525 tan solo soporta el tráfico local. Sin embargo, al acercarnos a los pueblos con servicios, hemos de tener cuidado por el movimiento de camiones que paran en ellos a comer o pernoctar (entradas y salidas).

En la parte baja de A Gudiña, prestando servicio a la vecina autovía A-52, abundan los hoteles, restaurantes y cafés, en los que podemos desayunar y adquirir un bocadillo para el camino.

Disponemos de tienda en la gasolinera (abierta las 24 horas) y de bar-restaurante en el hotel (cafetería abierta las 24 horas). Hasta As Vendas da Barreira no encontramos más servicios.

En esta etapa, y hasta Verín, solo disponemos de hostales y hoteles; las opciones son muy escasas y no precisamente baratas.

La tentación es permanente y tiene un nombre: N-525. Se avanzará más rápido, y con menos cuestas al aprovechar sus viaductos, pero perderemos la sensación de estar "haciendo el Camino". Quizá el tramo más prescindible sea el del rodeo por el valle del Mente, entre San Lourenzo de Pentes y O Navallo.

Dos referentes de los productos de A Gudiña y Riós: las carnes de vacuno o cabrito y, por supuesto, la castaña.