El Gobierno de La Rioja pavimenta con hormigón impreso un tramo de bajada a Santo Domingo de la Calzada

Acabamos de pasar por este tramo del Camino Francés en octubre, y no detectamos ningún problema de conservación en la pista agraria que desciende de Cirueña a Santo Domingo de la Calzada. Al parecer, para su estabilización frente a la acción del agua, ignoramos a petición de quién, el Gobierno de La Rioja ha decidido pavimentar el tramo de mayor pendiente, al lado del área de descanso del Alto de Vallejanco, nada menos que con hormigón impreso.

La solución del uso de este tipo de firme con burdo aspecto de enlosado, un esqueumorfo erradicado de las buenas prácticas de intervención sobre caminos históricos, es un nuevo despropósito atribuible a esos políticos y gestores que no saben lo que es preservar un Bien de Interés Cultural declarado Patrimonio Mundial, y que aplican recetas fáciles sin darse cuenta de que con tantos kilómetros nuevos de hormigón (a sumar los 3,5 km, nada menos, que han implantado en el Camino Francés por Aragón, la bajada de Grañón, la llegada a Redecilla o la bajada del Alto de Mostelares), esta ruta va a acabar desacreditada y relegada en las preferencias, como ya está lamentablemente ocurriendo, entre los peregrinos que desean pisar senderos y vías de tierra como los de Francia, Italia o Suiza. Luego…, que no lloren.