Etapa 20: Villaharta - Alcaracejos | Recorrido

Distancia: 
33,7 km
Duración: 
9 h 15 min
Dificultad: 
4
Paisaje: 
3

0,0

33,7 km

La etapa arranca ante el ayuntamiento y prosigue a lo largo de la acera de la Carretera de Pozoblanco (CO-6410); salimos del pueblo en ascenso, siempre de frente por el arcén de dicha carretera estrecha y sinuosa. Aunque el tráfico sea escaso deberemos extremar la precaución, prestando atención a los automóviles o camiones que puedan venir en cualquiera de ambos sentidos.

2,2 Senda a la izquierda (mucha atención a la señal, con un pequeño rótulo y un par de flechas pintadas en el arcén). Los ciclistas también deben dejar aquí la carretera. El camino arranca a media ladera; tras apenas 250 metros, junto al cortijo de San Isidro, nos incorporamos a una pista ancha de tierra que seguimos a mano izquierda, donde comienza un tramo magnífico. Al cabo de 3,2 kilómetros, después de varias bifurcaciones bien señalizadas, dejamos la pista por la que veníamos y tomamos un camino a la derecha en ascenso; 350 metros más adelante lo abandonamos para internarnos por un sendero a la izquierda, muy estrecho y envuelto por vegetación; avanzamos disfrutando del entorno, con encinas chaparras y líquenes colgando de sus ramas, para iniciar una bajada muy pronunciada que finaliza ante el cauce del río Guadalbarbo. 

4,5 Vado del río Guadalbarbo (suele estar seco buena parte del año). Nada más cruzar el río, toca volver a subir: las flechas nos dirigen a la izquierda por un sendero poco marcado, que asciende hacia un pequeño collado; llegados a una intersección, giramos a mano derecha para tomar el camino de bajada; 700 metros después nos incorporamos a una pista ancha de tierra, que corresponde —una vez más— al trazado de la Cañada Real Soriana. Seguimos esta recta interminable con toboganes hasta llegar a una pequeña explanada con un cartel explicativo.

6,2 Bifurcación. Abandonamos la pista y tomamos el camino que sale a la derecha. Este camino nos introduce en un olivar, bordeando el arroyo del Lorito que queda siempre a nuestra derecha; tras superar un recodo (es posible que esté embarrado) comienza una cuesta con fuerte pendiente, tramo de la Cañada Real.

2,5 Minas de Calatraveño, donde podremos observar restos de la antigua Mina Guillermín, de la cual se extraía barita y plata. Superamos las casas abandonadas del Ventorrillo, con algún tramo en ascenso, llegamos ante una curva con una torreta eléctrica y dos mojones de granito.

1,1 Alto de Calatraveño.

[En este punto tenemos la posibilidad de acceder, a 800 m por la izquierda, a la carretera N-502 a la altura del puerto de Calatraveño, lugar habitual para esperar al taxi en el caso de usar este servicio].

En la curva dejamos la pista y continuamos de frente por camino de tierra, desde el cual divisamos a lo lejos la llanura del valle de Los Pedroches; comienza aquí el tramo conocido como Barranco de la Calera, una bajada pronunciada y con bastante piedra suelta. Poco después, ya en terreno más llano, pasamos ante un porche con aspecto de parada de autobús, junto a la entrada de la finca Villa San Juan, donde hay un grifo de agua potable: es un buen lugar para descansar unos minutos.

1,5 Porche y grifo de agua. Al cabo de 400 metros tomamos un camino a la derecha, cruzamos una pista ancha y continuamos de frente; después de una bajada, superamos un pequeño arroyo y 800 metros después topamos con otra pista ancha, junto a un acceso de la finca Carboneras; cruzamos la pista y continuamos en subida, en paralelo a la alambrada, por un territorio ondulado que corresponde a la Vereda de Espiel a Pozoblanco, vía pecuaria utilizada tradicionalmente para el paso de rebaños de ganado. Llegados a un alto, franqueamos la cerca de una finca (Cortijo de la Hoyariza) y entramos en una dehesa donde suelen campar cerdos ibéricos; después de dejar a nuestra izquierda la casa Villa Coracha, superamos un portón e iniciamos una bajada con firme irregular y fuerte pendiente, que finaliza al cabo de un kilómetro ante el cauce del río Cuzna; junto al vado vemos una casa y, a pocos metros, las ruinas del Molino Horadado.

4,4 Vado del río Cuzna. Lo cruzamos y continuamos de frente, en ascenso; al cabo de 800 metros, en una bifurcación a la izquierda, pasaremos junto una pequeña cruz de piedra. Llaneamos por diferentes pistas de tierra a lo largo de una zona conocida como Los Jarales, en referencia a la abundancia de dicha planta, siguiendo en cada recodo la dirección que marcan las flechas; finalmente desembocamos ante una carretera rectilínea, la comarcal A-435 (que lleva a Pozoblanco), y la atravesamos de frente. Esta intersección sería otro posible punto de recogida por parte del taxi (ver Al Loro). 

2,4 Carretera comarcal A-435. La atravesamos y continuamos de frente, en suave ascenso por un camino pedregoso; en breve comienza un tramo más amable, sin apenas desniveles, por un camino ancho de tierra entre dehesas y pastizales. Acompañados por muros de piedra o cercas de alambre de las fincas, llegamos finalmente al merendero municipal situado en el paraje conocido como Pozo de la Benita, zona de recreo con mesas de piedra (abierto sólo algunos festivos y en romerías), dejando a nuestra izquierda la verja de entrada a una capilla.  

4,3 Merendero Pozo de la Benita. Giramos a mano izquierda para tomar una pista asfaltada, si bien al cabo de 1,3 kilómetros el firme vuelve a ser de tierra y gravilla suelta. Avanzamos siempre de frente por dicha recta interminable, flanqueada por granjas y explotaciones ganaderas, en un tramo sin mayor aliciente; finalmente, tras superar una instalación de placas fotovoltaicas, vuelve el asfalto y pasamos junto a la ermita de San Sebastián, situada sobre una loma, desde la cual divisamos la villa de Alcaracejos a nuestros pies.

3,8 Ermita de San Sebastián. Tras un suave descenso por la acera, entramos en el casco urbano de Alcaracejos; el camino prosigue de frente por la calle San Sebastián hacia el centro de la localidad, para desembocar en la plaza de Los Pedroches, donde está la Casa Consistorial (ayuntamiento).

0,8 Alcaracejos, plaza de Los Pedroches, ayuntamiento.

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