Etapa 3: Salas - Tineo | Recorrido

Distancia: 
19,8 km
Duración: 
5 h
Dificultad: 
3
Paisaje: 
3

0,0

7,1 km

Salimos de Salas pasando por debajo del arco que une el palacio Valdés-Salas y la torre medieval. Por una agradable y tranquila pista al lado del río Nonaya, entre robles y castaños, vamos ganando poco a poco altitud.

Más adelante la pendiente se torna más pronunciada y a media subida, por enésima vez, nos topamos con las obras de la autovía A-63. Otra vez un desvío inesperado que endurece y alarga el recorrido; afortunadamente está bien señalizado.

Desembocamos en la carretera nacional N-634, por el arcén de la cual nos vemos obligados a caminar unos quince minutos, hasta tomar un camino en subida a mano izquierda (con giros extraños, atención a las señales) que nos conduce a la aldea de Porciles. A partir de aquí el camino ya llanea hasta Bodenaya, donde hay un albergue de peregrinos.

7,1

1,1 km

Por la derecha y en paralelo a la nacional N-634 llegamos a La Espina.

8,2

1,3 km

Siguiendo la carretera N-634, y justo pasada la última casa de La Espina, tomamos a la derecha en diagonal un camino en muy estado, que sube a media ladera y avanza dejando la carretera abajo a mano izquierda.

9,5

2,9 km

Pasamos por pequeñas aldeas sin servicios, en las que vemos algunos hórreos. Caminamos entre robles, por caminos de tierra, con algún repecho fuerte, hasta bajar de nuevo a la misma carretera a la altura de El Pedregal.

12,4

7,4 km

A la salida de El Pedregal tomamos otro camino a mano derecha, en subida, que avanza a media ladera a través de un espeso bosque. Hasta Tineo el recorrido es precioso, en plena naturaleza, en un silencioso entorno rural.

A la entrada de Tineo bordeamos el campo de fútbol y llegamos a la capilla de San Roque, junto a un parque. Tomamos el paseo Camino de San Roque, en la parte alta de la población; para acceder al albergue debemos doblar a la izquierda en bajada, en un desvío bien señalizado, mientras que si queremos continuar el camino seguimos recto.

19,8