Etapa 11: Portugalete - Castro Urdiales | Recorrido

0,0

5,5 km

Arrancamos en la calle Casilda Iturrizar, que asciende desde la ría y dispone de rampas mecánicas. Seguimos de frente por la avenida de Carlos VII y al cabo de 300 metros pasamos junto a una boca del metro (como las de Bilbao, fue diseñada por el arquitecto británico sir Norman Foster); continuamos por la acera derecha de la avenida, superamos una gran rotonda y 300 metros más adelante tomamos a la derecha un bidegorri, muy frecuentado por ciclistas y caminantes; éste en concreto resulta singular, pues incluye viaductos, protecciones laterales y áreas de descanso.

1,2 Inicio del bidegorri. Seguimos por dicho carril, que se eleva por encima del trébol de la autovía; al cabo de 800 metros pasamos junto a una escultura metálica, donde hay un poste indicador que ofrece un camino alternativo por la localidad de Ortuella, pero nosotros continuamos de frente, en ligero ascenso. Al cabo de 1,6 km superamos un área de descanso con mesas y una fuente; 500 metros después llegamos a un cruce donde giramos a la derecha para seguir otro bidegorri; cruzamos por debajo de la N-634, pasamos cerca del barrio de Nocedal y poco después bordeamos la localidad de Gallarta (municipio de Abanto-Zierbena).

4,3 Gallarta.

5,5

5,1 km

Pasamos por detrás de unas casas en hilera y franqueamos un paso inferior bajo la nacional N-634; continuamos por el bidegorri durante 1,2 km, pero lo dejamos para cruzar un puente a la izquierda sobre la N-639; acto seguido viene otro puente y, después de una bajada, un paso inferior bajo la autovía A-8. Continuamos por pista hormigonada, entre paisajes muy agradables, y al cabo de 700 metros volvemos a encontrar el carril rojo; tanto da seguir de frente por la pista como tomar el bidegorri a mano izquierda, pues ambos trazados discurren en paralelo y confluyen en la turística playa de La Arena (perteneciente al municipio de Zierbena), con varios bares y restaurantes.

10,6

1,1 km

Avanzamos a la izquierda, por detrás del aparcamiento, hacia el extremo de la playa, para continuar por una pasarela de madera sobre la arena; justo después de cruzar un puente peatonal (con pilón metálico y tirantes, sobre la desembocadura del río Barbadun) llegamos a una placita donde vemos una residencia de tercera edad y la ermita de la Virgen del Socorro. El camino no entra en el pueblo de Pobeña, que queda a 300 metros y cuenta con albergue de peregrinos, bares y restaurantes.

11,7

5,6 km

Atención aquí: al principio de la placita, antes del aparcamiento, giramos a mano derecha para adentrarnos en un camino algo escondido entre la vegetación, donde comienza el paseo Itsaslur (o ruta del Piquillo), que arranca con unas escaleras que ascienden hasta una pista cementada que bordea el litoral. Se trata de una vía verde que recupera la traza de un antiguo tren minero, un magnífico balcón sobre el mar, con prados, vacas y vistas dilatadas de toda la costa. Al cabo de 2,0 km superamos una explanada con un aparcamiento y algo más allá, tras un paraje conocido como El Hoyo, abandonamos el País Vasco y entramos en la Comunidad Autónoma de Cantabria 

3,5 Límite País Vasco - Cantabria. Seguimos en todo momento en paralelo a la costa. Atención, pues en un punto vemos un poste de madera que marca a la izquierda hacia Ontón, pero no hacemos caso: nosotros seguimos de frente por la vía verde (tal como indican el resto de flechas adhesivas o pintadas a mano) y llegamos al túnel de La Galerna, reforzado interiormente, que atravesamos. Continuamos durante 1,1 km hasta pasar bajo el viaducto de la autovía A-8, donde giramos a la derecha para iniciar una bajada por camino de tierra que nos conduce a Ontón, pueblo pequeño pero con un albergue muy acogedor.

2,1 Ontón.

17,3

4,7 km

En una calle del pueblo tenemos, pintada en el suelo, la bifurcación entre las dos opciones diferentes para seguir hacia Castro Urdiales: por el camino oficial (14,8 km) o por la ruta directa (8,1 km).

- El camino oficial, dibujado a trazos en el mapa, implica alargar la etapa 6,7 km más. Pasa por Baltezana, Otañes, Santullán y Sámano, dando un rodeo considerable para evitar la nacional, si bien discurre casi siempre por carreteras estrechas y sin arcén; esta opción tenía sentido cuando aún no existía la autovía y la nacional acumulaba todo el tráfico; la ruta, sin especiales alicientes, está bien señalizada y es válida para aquellos que no les importe caminar unos kilómetros más.

- La ruta directa, dibujada en línea contínua en el mapa, va por el arcén de la N-634 hasta Mioño (sin demasiado tráfico desde la apertura de la autovía) y después continúa hacia Castro Urdiales por camino. Es el recorrido más corto, también está señalizado con flechas y es el que hoy en día eligen la inmensa mayoría de peregrinos, por lo cual lo explicamos a continuación: 

Desde Ontón ascendemos hasta la carretera N-634, que tomamos a mano derecha, para seguir con precaución por su arcén; pasamos bajo la autovía, superamos una rotonda donde hay una gasolinera y continuamos en ascenso durante 1,5 km. Al comienzo de la bajada la carretera dibuja una curva muy cerrada, para acto seguido pasar bajo un viaducto de la A-8; aquí, a nuestra derecha y unos 150 metros más arriba, vemos el aparcamiento de un restaurante frecuentado por camioneros, donde ofrecen buen menú; superamos el lugar de Saltacaballo (donde antaño estaba el restaurante) y, siempre por el arcén, continuamos la bajada hacia el pueblo de Mioño.

22,0

3,4 km

Aquí debemos abandonar la nacional N-634 (pues el tramo siguiente es peligroso, con curvas y sin apenas arcén) y podemos escoger entre dos magníficas opciones: la primera, sin flechas pero muy recomendable si el día es bueno, sería tomar a mano derecha alguna de las calles o caminos que bajan a la playa de Dícido, donde seguiremos la senda costera que pasa por junto un cargadero de mineral (buen ejemplo de patrimonio histórico industrial) y continuaremos en paralelo al mar, bordeando una urbanización y descendiendo a la playa de Brazomar, ya en el casco urbano de Castro Urdiales; la otra opción (señalizada con flechas y perfecta para bicicletas) arranca unos metros antes de la iglesia de Mioño, donde se gira a mano izquierda por una calle en subida, pasando junto al centro de jardinería El Roble y el restaurante-asador El Túnel, para seguir de frente por camino, a la sombra de los árboles. Ambos recorridos convergen en el paseo de la playa de Brazomar, por el que llegaremos al puerto y al centro histórico de Castro Urdiales.

Nota: si nuestra intención es pernoctar en el albergue municipal de peregrinos deberemos seguir caminando 1,3 km más allá del centro, pues se encuentra a la salida de la población, junto a la plaza de toros.

25,4