El Camino Vasco del Interior de Irún a Santo Domingo de la Calzada, 2013
Nombre:
Xavier Oliver
Cómo:
A pie
Cuándo:
Agosto de 2013
Experiencia:
Me ha encantado el camino. La experiencia ha sido muy positiva, he conocido lugares, gente diversa, paisajes y sobre todo, se aprende a vivir con poco. El camino es un reto personal, ser capaz de hacer y vivir algo diferente a lo que haces rutinariamente. También es otra forma distinta de conocer el país. En este camino he conocido más a fondo la cultura vasca, ya que es un camino con pocos peregrinos y pasa por lugares donde no hay turismo de masas.
Dificultad:
Si estás acostumbrado a hacer deporte, o simplemente caminar, no es duro en absoluto. En el tramo guipuzcoano, se combina monte con tramos urbanos. Se atraviesan varias ciudades y en varias etapas se sigue el curso de un río por un valle, son tramos bastante llanos y asequibles. En Álava casi todo es llano y hay varios tramos de carretera, la parte menos atractiva del camino. El tramo más duro y a la vez más bonito, es la subida al túnel de San Adrián para entrar en Álava, hay una fuerte subida prolongada, pero al final tiene su recompensa con vistas fabulosas del paisaje. Hay que tener cuidado con los días de lluvia, ya que los tramos que transcurren por los bosques suelen tener mucho barro.
Señalización:
La señalización es excelente en el País Vasco. Hay carteles en madera que te indican no sólo el camino, sino también las distancias a los pueblos y lugares de interés. Cuando el camino transcurre por zona boscosa hay que ir con cuidado, ya que a veces no se ven las flechas amarillas. Solo me perdí en una ocasión, pero en estos casos cuando llevas tiempo sin ver ninguna flecha hay que sospechar y volver sobre tus pasos, busca la flecha que puede estar en cualquier sitio: un árbol, una roca... Esto me sirvió para poder continuar el camino.
Albergues:
Siempre he podido dormir en albergue. Eso sí, albergues de peregrinos no hay muchos, pero tienes opciones de albergues privados y puedes encontrar uno cada 20 kilómetros o menos. Al no ser un camino muy transitado, es difícil que te quedes sin sitio en el albergue, pero en los privados es recomendable hacer reserva, ya que no sólo duermen peregrinos, en algunos incluso puedes encontrar grupos que los reservan. Los albergues son pequeños, con pocas plazas, a excepción de Vitoria que se duerme en el albergue juvenil que es bastante confortable. En Zegama no hay albergue pero habilitan una zona de un pabellón deportivo con literas.
Sugerencias a los futuros peregrinos:
Recomendaría a los futuros peregrinos que antes de iniciarse en el camino, entrenen el hábito de caminar, si no se les puede hacer duro. Llevar en las mochilas solo lo que vayan a necesitar, no añadir más peso de la cuenta que luego pasa factura a la espalda. Para mí fue muy útil llevar una guía impresa con los itinerarios, las distancias entre pueblos y los servicios que dispones en cada sitio. Conocer si vas a encontrar algún sitio donde avituallarte antes de iniciar la etapa para salir ya con las provisiones suficientes. En Álava las distancias entre pueblos son bastante largas y en algunos puede que no encuentres ni siquiera un bar. Si haces el camino en agosto, ten en cuenta los horarios de las tiendas de comestibles, ya que muchas no abren por las tardes. También es bueno llevar un kit de curas por si salen ampollas, puede que no encuentres una farmacia en kilómetros. Finalmente, hay que hacer el camino con una mentalidad abierta y un cierto espíritu de aventura. Si te gusta, repites ya que las posibilidades que ofrecen los diferentes caminos son muy variadas.