Etapa 10: Pesaguero - Monasterio de Santo Toribio de Liébana

La última etapa de este camino es también una de las más bonitas y entretenidas; la primera parte discurre entre pueblos minúsculos, sin apenas servicios, mientras disfrutamos del paisaje siempre verde de los valles de Liébana, así como de la bellísima iglesia de Santa María de Piasca, con sus dos portadas románicas. Llegados a Potes, capital de la comarca, aprovecharemos para reponer fuerzas —la especialidad es el cocido lebaniego— tras lo cual afrontaremos el tramo final de nuestra ruta: la subida al monasterio de Santo Toribio, donde obtendremos la Lebaniega, diploma que certifica que hemos completado la peregrinación.

Distancia: 
22.8 km
Duración: 
6 h 15 min
Dificultad: 
3
Paisaje: 
4