Etapa 69: Orio Litta - Piacenza | Recorrido

Desde la iglesia caminamos hasta el palacio Litta Carini, que bordeamos para descender de nuevo a la llanura de aluvión. Para seguir a Corte Sant’Andrea hay dos opciones: una vía de tierra y la carretera. Una vez en Corte podemos hacer dos cosas: seguir por el dique hasta el embarcadero o atravesar la localidad bajo su arco de ingreso.

En el embarcadero del Transitum Padi disponemos, mientras esperamos a que llegue la barca, una zona de descanso. La navegación en la motora, muy veloz, cubre casi una legua hasta Soprarivo.

VARIANTE A LA IZQUIERDA DEL RÍO PO

Al margen de la navegación, dicha alternativa prosigue por territorio lombardo. Pronto nos alejamos del Po y su arboleda, que traza un amplio meandro al sur, por una carreterilla local que transita sobre el dique cerca de la granja Case Nuove y, entre maizales y choperas, de la aldea de Guzzafame.

Siempre por el dique, en vez de entrar en el núcleo vamos a seguir al frente hasta aproximarnos de nuevo el río, que ahora dibuja otro meandro en sentido contrario. A la vista de la población de Somaglia, distante 1 km al norte, pasamos entre la cascina Castelnuovo y el embarcadero de Gargatano.

Varias pequeñas granjas jalonan el recorrido hasta Valloria, donde nos apeamos del dique para cruzar el pequeño núcleo. Posee iglesia neorrománica de ladrillo y un parque para reposar.

11,6 Valloria. Al terminar las casas recuperamos el tránsito por el dique a la izquierda, sin más novedad hasta converger con la SS9. Por fortuna, nosotros continuamos por la vía elevada, en paralelo a la carretera, bordeando el pueblo de San Rocco al Porto.

Al final es obligado cruzar el Po por un largo puente, con un estrecho paso peatonal a la izquierda, que se corresponde con la Via Emilia. La entrada en Piacenza y la Emilia Romagna se efectúa siempre al frente por el Viale Risorgimento, que atraviesa la monumental Piazza dei Cavalli para, 100 m después, converger con la ruta principal en el Corso Garibaldi.

10,2 Piacenza.

Ya hemos desembarcado en la orilla derecha, que se corresponde con la región de la Emilia-Romagna, la cuarta que hollamos en Italia. Después de poner el sello en la casa del señor Danilo, volvemos a recorrer el dique sobre el bosque de galería que acompaña al gran río. Dando un absurdo rodeo por la aldea de Masero (ver atajo en Al Loro), proseguimos al sur, ante un oratorio de la Pasión, a Calendasco. La Via Mazzini nos conduce hasta la iglesia y el castillo.

Aquí principia un penoso trayecto por la SP13. Primero tiene arcén amplio, hasta el lugar de Zerbione, con área de descanso, pero luego se torna peligroso, por la aldea de Arena camino de Incrociata.

Junto al bar-trattoria Allo Sbaraglio, muy recomendable para comer, dejamos la carretera provincial para seguir al frente otra parecida. Una larga recta, también sin arcén, nos deja ante la iglesia de los santos Pietro e Paolo de Cotrebbia Nuova, con alta torre (1919).

Con sus bares de carretera y un aspecto decadente, continuamos sobre el asfalto hasta Malpaga. Cuando el vial gira al sur, encontramos un área de descanso en el inicio del Parque Fluvial Regional del Trebbia. En vez de buscar sus senderos al borde del río, se nos invita a continuar por la carretera, provista de un carril bici. De este modo alcanzamos, bajo la A21, la inhóspita zona empresarial de Ponte Trebbia.

Aquí hay dos puentes largos de ladrillo muy parecidos: el del ferrocarril, bajo el que pasamos, y el de los automóviles, al que subimos. El río, pese a su amplio cauce que en invierno soporta grandes avenidas, permanece prácticamente seco durante el estío. Tras el puente comienza un infernal e interminable recorrido hasta Piacenza por el barrio de Sant’Antonio a Trebbia, con su iglesia a mano derecha.

El extrarradio urbano agresivo, en su máxima expresión, se manifiesta con sus concesionarios y talleres de coches, gasolineras y almacenes, bares y restaurantes de transportistas y comerciales, etc. La VF parece haberse esfumado, al menos si atendemos a las marcas, y la vieja Piacenza nunca comienza. Por fin hace acto de presencia y es posible seguir al frente (ver Al Loro) por la Via Taberna Giuseppe hasta la Piazza del Borgo, y luego por el Corso Garibaldi hasta las inmediaciones de Piazza Cavalli, verdadero centro neurálgico, o hasta la catedral, ambas ligeramente apartadas a la izquierda de la marcha.