Etapa 8: Gernika - Lezama | Al Loro

Otra etapa por el interior y lejos del mar. En los quince primeros kilómetros, hasta Goikolexea, hay fuertes subidas y bajadas, por monte, con pistas forestales, senderos por el bosque y algún tramo de asfalto. En los kilómetros finales avanzaremos a lo largo de un andadero en paralelo a la carretera, sin apenas sombra, en llano por el valle.

Algunos peregrinos deciden prolongar la etapa hasta Bilbao: serían 30,8 km en total y con un fuerte repecho —el monte Avril— en el último tramo, por lo cual esta posibilidad sólo estaría al alcance de los más preparados.

No encontraremos bares hasta Larrabetzu, sólo una fuente junto al caserío Pozueta y otra en Goikolexea. Aunque durante la temporada estival algunos de los caseríos que alojan peregrinos (Pozueta, Gerekiz, Eskerika) suelen vender latas de bebida, nuestra recomendación —como siempre— es llevar buena provisión de agua y algo para picar durante la etapa.

A la salida de Gernika, después de la ermita de Santa Lucía, afrontamos una subida muy dura por un camino con bastante piedra suelta, ganando 270 metros de altitud en apenas tres kilómetros.

Existe una variante para bicicletas (en km 10,7 de la etapa, ver itinerario a trazos en el mapa) que arranca en una bifurcación bien señalizada, donde los caminantes toman un sendero a la izquierda, en franca subida, mientras que los ciclistas seguirán de frente por la pista forestal y después a mano izquierda por la carretera BI-2713.

Esta variante por la pista forestal —que aumenta la distancia apenas un kilómetro— también es utilizada por los peregrinos a pie si la senda está muy embarrada o cuando se realizan talas en el monte, pero deberán ir con cuidado durante el tramo por carretera, pues tiene muchas curvas.

Los albergues municipales de Larrabetzu y Lezama, gestionados por hospitaleros voluntarios, están cerrados desde 2023. Contamos con alojamientos convencionales en ambas localidades. El siguiente albergue de peregrinos se encuentra en Bilbao, a 11,0 km de Lezama.