Albergue A Pociña de Muñiz - Comentarios

No me quedé a dormir, pero si me tomé un tentempié que me preparó José, una persona sencilla que lo único que trata de hacer es que te encuentres a gusto y lo consiguió pues estuve un buen rato charlando con él y su madre me trajo castañas recién asadas. Me enseñó el albergue y es una pasada por las instalaciones confortables que tiene. José , gracia por haberme hecho estar en tu casa y muy agradable. Y probé el pan recién hecho, que estaba riquísimo. Conocí este lugar en octubre 2020, en mi etapa a Lugo, tomé un tentempié y estuve un buen rato hablando con Pepe y me enseñó las excelentes instalaciones. Casi cinco años después, partí esta etapa para poder alojarme en la Pociña de Muñiz. Desde que entras por la puerta Fina, Pepe y su hijo, te atienden de una forma diferente, agradables, afectuosos, muy atentos a cualquier necesidad, es un oasis en esta zona lucense. El albergue con literas muy cómodas, los colchones y almohadas perfectos para descansar plenamente. Habitación amplia, luminosa y con una zona común con un buen sofá. Los baños para hombres y mujeres no les falta un detalle y sobre todo limpios. La cocina completa para poder hacer comida. Un jardín de ensueño, para descansar y relajarse después de la etapa. Nosotros comimos lo elaborado por Tina, en la comida, puré de calabaza, exquisita empanada y un excelente bistec de ternera con patatas fritas, con ensalada de Lechuga y de postre queso de Arzúa con membrillo. Para la cena, una tortilla de patatas con cebolla impresionante con ensalada de lechuga y cebolla, de postre queso de Arzúa con membrillo. El desayuno café con leche, tostadas, tomate, tortilla de patatas con cebolla, mantequilla y mermelada. Contundente para reanudar el Camino a Lugo. Muchas gracias familia por vuestra hospitalidad.

Pase por ahí el día 23 de agosto, iba de camino a Lugo y pare a desayunar porque me llamó la atención el sitio, me atendieron estupendamente, la familia muy agradable me contaron la historia del albergue, me lo enseñaron y es mucho mejor que en las fotos, pasé un rato muy agradable lastima que acababa de salir si no me hubiera quedado a pasar noche merece la pena.

El pasado 30 de julio estuvimos alojados en este albergue y no hay palabras para describir todo lo que vivimos esa tarde-noche en compañía de Pepe, Fina y toda la familia. Desde luego fue un super lujo poder alojarnos en A Pociña de Muniz ya que lo consideramos el mejor albergue que hemos visitado en los últimos 6 años en diferentes Caminos de Santiago. Instalaciones, acogida, amabilidad, servicio, entorno, tranquilidad y, por supuesto calidad/precio de 10. Desde luego merece la pena detenerse antes de llegar a Lugo y disfrutar del albergue, y sentirte como si estuvieras en tu propia casa. Recomendable para todo el mundo y nosotros, por supuesto, volveremos. Un saludo desde Irun de Juan Carlos y Mamen.

Vale la pena hacer un esfuerzo y quedarse en este albergue por descubrir, el trato genial, las instalaciones inmejorables; de lo mejor que he visto en varios caminos que llevo a mis espaldas. La cena brutal en cuanto a calidad y precio.... Repetiré seguro.