Albergue de peregrinos de A Cabana - Comentarios

4 Septiembre 2023. Sitio sin nada alrededor, Un particular te vende algunas cosillas, sin internet, completamente solitario y sin opciones. Para descansar está muy bien pero el hecho de no tener internet lo convierten en un lugar inhóspito. Donde ni siquiera puedes consultar la siguiente etapa. Hacia frio el 4 de septiembre no quiero imaginar en invierno. Aunque las instalaciones están muy bien y nuevas (algo descuidadas) con calefacción y todo lo necesario. El hospitalero majo. Albergue Bonito con grandes ventanales pero al ser de una especie de construcción por módulos lo hacen poco cómodo y acogedor.

Wenn möglich, nehmt lieber eine Albergue vorher......die ist schon recht abgeranzt, aller supereng und mit Betten nur so vollgepflastert, dass man nicht einmal einen Platz für den Rucksack hat......günstig, aber 0 Sterne leider.....

Cuando me hospedé allí lo estaban arreglando. Literalmente, porque los obreros estaban por todas la habitaciones. El albergue es realmente bonito, la cocina tiene un gran ventanal con preciosas vista. Lo malo es que esta dividido en como zonas separadas. La cocina está separada de las habitaciones, la zona de lavado también estaba separada. Si vas en invierno, con frío, lluvia, barro, no es muy agradable tener que salir al exterior. El hospitalero era majo, pero hubiera sido un detalle por su parte que nos hubiese dejado dormir en una habitación pequeña que había con 4 camas, a los 3 que estábamos, en lugar de hacernos dormir en la habitación grande. Porque la calefacción era del mismo tamaño en las dos habitaciones y hacía un frio considerable. El señor de la casa de al lado si que te vende cosas, pero a buen precio, si puedes llévate las cosas, pero bueno entiendo que al final si nos hace un favor vendiendonos esos productos. Lo que si que es un detalle es que la cocina está equipada, porque los que lo gestionan entienden que allí no hay más opciones. Me parece un sitio precioso para alojarse en verano, no repetiría quedarme allí en invierno