Hotel Rural Posada El Embrujo - Comentarios

Creo que los nuevos dueños no se han enterado lo que es estar en el Camino. Si hay que reservar comida, pero dejar sin cena a 4 peregrinos pq " no tenian comida" me parece bestial, no fueron capaces de hacer ni una tortilla y eso repito que estaban alojados en su establecimiento. Ojala nadie volviera a ir a ese lugar, un cero para los dueños.

Sitio agradable y limpio, bastante bien no es caro aún habiendo poca oferta en la zona

No vayáis, intentad parar en otro sitio o cambiar ruta. Personal prepotente y antipático, excepto la camarera, que es muy amable y hace su trabajo estupendamente. Comida correcta, cena sobras de la comida recalentada. Prisas por perdernos de vista.Los peregrinos no somos bienvenidos. Se puede entender que sea difícil improvisar en estos pequeños pueblos,pero las formas han de ser mínimamente correctas. Nos perdonaba la vida por pedir una cerveza a las 20:15 pq cerraba a las 20:30. La cena era a las 19 y a las 19:02 ya estaba llamándonos para q fuéramos YA! Acabamos de cenar a las 19:45 pq nos metía prisa cada 10 minutos. He de decir que el albergue está muy bien y es precioso. Pero yo no volvería,antes duermo en el río. Mis compañeros pensaron igual,daba miedo preguntar o pedir cualquier cosa

El sitio es precioso. Las habitaciones son una pasada. Y los propietarios son un encanto. Por 27 euros habitación y cena casera no se puede pedir más. Nos tomamos una botella de sidra de caer de culo. Repetiré seguro.

Si precisas de reserva es la mejor opción, el hotel está muy bien, cuidado y limpio. El desayuno y la cena muy correctos, eso sí ya avisan de los horarios de atención, ya que los dueños no viven allí y marchan pronto. Por lo demás es un sitio ideal para descansar y atacar la siguiente etapa con fuerzas.

Mala experiencia, desde el primer momento que reservamos mesa para la cena se nos advierte de forma un tanto imperativa que se da de cenar a las 19:00h. ante nuestra afirmación de que eramos conscientes de ello se vuelve a repetir la advertencia de forma un tanto molesta. Posteriormente al finalizar la cena y cuando estabamos terminando los postres, visita del camarero para decirnos que nos fueramos que tenía que cerrar (eran a penas las 20:15 h.). Me consta que algún otro peregrino tuvo mala experiencia en cuanto a negativa a preparar un bocadillo o cobro de un precio excesivo por dos cafés.

Similar experiencia a lo comentado por Diegonis. Estando alojados en albergue porque solo tenían aquí servicio de comidas, había una mesa esperándonos cerca de las 4 pese a estar todo completo... Calidad de restauración y calidez en la atención para ser un pueblito de 30 habitantes. Al día siguiente era lunes de descanso para el personal pero tuvimos café y tostadas listas para salir a batallar con lluvia y fango ... No se puede pedir más, solo agradecer

Muy buen hostal que se agradece después de la larga etapa desde La Robla. Habitación amplia con buena cama y buena ducha así como una buena vista. Se puede cenar y desayunar y el personal es muy amable.

Cómodo. La cena excelente. El dueño no es precisamente simpático, pero aceptable