De Saint Jean Pied de Port a Santiago, abril de 2015
Es de las mejores experiencias en mi vida, y claro que cada quién hace su propio camino, mi propósito era cargar mi mochila, nunca tomar un taxi, y caminar a diario, claro sin ponerme en riesgo y lo conseguí, lo cual es muy satisfactorio.
Sí, cada tramo tiene lo suyo, pero a mi en lo personal lo que más duro se me hizo fueron las bajadas, en especial las del la Sierra del Perdón y la Cruz del Ferro, pues aparte de bajadas pronunciadas están con mucha piedra.
La señalización es buena, lo que sí en algunos lugares se puede confundir, ya que ciertos albergues o bares utilizaban la flecha para llegar a sus negocios.
Yo llegué a hostales y hoteles, todos muy buenos.
Yo recomendaría evitar los meses muy calurosos, no me puedo imaginar esas jornadas complicadas con calores extremos.