Etapa 20: Ribadesella - Colunga | Al Loro
Hoy los desniveles ganan un cierto protagonismo, aunque sin parangón con las jornadas vascas. Gran parte de la etapa es costera, pero más allá de La Espasa nos adentramos en tierra firme. | |
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400 metros después de cruzar la ría del Sella, el camino oficial gira a la izquierda por la calle Dionisio Ruisánchez; sugerimos seguir de frente y recorrer hasta casi el final el majestuoso paseo marítimo (luego recuperamos el camino por la izquierda), mucho más agradable, y que avanza en paralelo (a 50 metros) a dicha calle, (ver track del Recorrido). | |
Entre Berbes y La Espasa recorremos un bucólico tramo por senda a través de prados y con vistas al mar. | |
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Quienes quieran pernoctar en el albergue de La Isla, desde la carretera N-632 deben seguir la flecha que señala una calle a mano derecha; en caso contrario, debemos seguir la nacional hasta el mojón que nos invita a tomar un camino a mano izquierda. Los que duerman en La Isla, al día siguiente tienen la opción de ir por Huerres para no retroceder (está señalizado). | |
El primer bar de la jornada que encontraremos abierto, posiblemente, será el que hay en Berbes, a pie de carretera, que abre a las 8 de la mañana, básicamente para ofrecer desayunos a los peregrinos. Los bares y restaurantes a pie de playa en Vega de Ribadesella abren al mediodía y sólo en temporada estival. Lo mismo vale para los bares y restaurantes en La Espasa y La Isla. Colunga sí cuenta con servicios estables, y buenos sitios para dormir y comer. | |
La extraordinaria iglesia prerrománica de Santiago de Gobiendes, la joya cultural de la etapa, cae a 1,4 km del camino; el desvío por carretera, bien indicado, lo encontramos entre La Espasa y La Isla. | |
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Destacan las fabes, a las cuales dedican una Semana cada año; vale la pena disfrutar de alguno de los platos con las variedades de esta legumbre que cultivan en la población. | |
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Cuenta con una importante producción de manzanas y su producto derivado asturiano por excelencia, la sidra. |
