Pues yo podría hacer un libro con las anécdotas de las veces que me han atacado perros, últimamente en casi todas las salidas y no hablo del Camino. Lo que pasa es que te vas acostumbrando y acabas viendo como normal lo que para nada lo es. En mi última salida al pasar por las afueras de un pueblo había un corral abierto y me salió un pastor alemán como una flecha al camino que a poco me muero del susto. Claro que no me mordió pero el susto no me lo quita nadie y eso que he estado en esa situación decenas de veces pero no por eso me acostumbro y creo que una situación muy desabradable y evitable. Hay muchas personas que ante situaciones así podrían responder de forma inadecuada echándose a correr como acto reflejo y que ante experiencias así han cogido miedo y no se atreven a salir, al menos solos. La anterior salida hice una ruta que pasaba por unos pueblos abandonados, pues justo a la entrada me salieron tres perros muy agresivos que logré mantener a la mínima distancia de 1 metro con el bastón mientras retrocedí como pude hasta que salió su dueño. Un capullo había decidio instalarse en una casa del pueblo en cuestíón y hacer suya la casa y la calle. Me tocó discutir con él y apunto estuve de llamar a la GC porque encima creía que tenía razón y que los perros actuaban protegiendo su territorio, osea las calles del pueblo. El otoño pasado haciendo una ruta que pasaba por un zona de pozas y saltos de agua que estaban adecuadas con pasarelas y escaleras de madera me toco pasar la situación más peligrosa y surrealista que he vivido con perros. Justo cuano iba a subir por una escalera de madera completamente vertical que salvaba un desnivel de unos cuatro metros me saltaron/bajaron dos perracos enormes completamente desenfrenados que si me llegan a pillar a mitad de subida (por suerte los oí ladrar y me paré justo abajo) me habrían caído encima y me abrían tirado. Sí, parece inaudito pero iban alocados hacia el agua y saltaron tocaron con las patas delanteras en un peldaño de la mitad de la escalera y cayero a mis pies ante mi perplejidad, ¿Álguien está preparada para que de repente, en el campo, le caigan dos perros enormes del cielo?. Pues sus dueñas llegaron tranquilamente al medio minuto tan felices y contentas. Cuando llegaron yo estaba todavía paralizado  e intentando asumir lo que había pasado y  sin poder ni articular palabra. Todo esto me parece un abuso y una falta de respeto por parte de los dueños de estos animales.