Pecando por Francia
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Dilemas de la vida.
En verano del 2019 subía yo en dirección contraria el Chemin de S.Jacques dirección Le puy en Velay. Una tarde, en Air sur l'Adour, mi hermana me llamó por teléfono desde España, y me preguntó qué tal si me acompañaba unos días de caminata por las Francias.
-Muy bien!, claro que sí! - respondí yo animado.
- Cuántos kilómetros haces al día?
-25-30, las etapas que marca Gronze.
- ¿podrían ser menos, límite 20km?
- Joer, Elena, ya estás condicionando… bueno, podríamos verlo.
El caso es que se animó, y quedamos que nos encontraríamos en Moissac. Al llegar, el tema de los kilómetros cotidianos volvió a salir y nos llevó un par de discusiones y unos tres días fijarlo. El problema era que las etapas marcadas por Gronze se ajustaban según localidades de cierto relevancia, y si no las seguíamos acabábamos en cualquier granja apartada donde las tardes se hacían soporíferas. Así que decidimos que hacíamos los 25-30 km pautados, pero con “una pequeña ayuda" de 5- 10 km en auto stop.
Ejem! Esto se supone que va contra toda ética del peregrino auto.suficiente. Pero vaya, para mí, por varias razones, era muy importante entonces el hecho de que mi hermana se hubiese animado a esta experiencia, así que prioricé su compañía a purismos peregrinos.
Y bueno, nos fue bastante bien. En la Francia del interior la gente es todavía muy gentil, y paran bastante los coches al hacer dedo (lo hacíamos separados, y a mi hermana le cogían casi a la primera. A mí me costaba más, pero nunca me quedé colgado).
Así estuvimos unos diez días. Recuerdo un mediodía, saliendo de un coche por los montes de Aubrac, me vio el dueño de un albergue y me dijo que eso era hacer trampas. Y yo le respondí:
- Mais oui, je suis un pecheur! (“¡Ay, sí , soy un pecador!”)
Me escocía un poco la conciencia, y traté de suavizarlo con humor, pero en cuanto salió de mi boca la palabra “pecador", algo hizo click! En mi cabeza, y me dije “bueno, uno no es peregrino por ser especialmente santo, sino precisamente porque tiene que redimir algún pecado, no?”. Así que, paradójicamente, lo que me alejaba de ser un purista de la ética de los peregrinajes por otro lado me metía más de lleno en el espíritu tradicional de los peregrinos.
Bueno, pueden sonar estas razones a excusa barata, pero creo que aquellos días con mi hermana bien merecieron la pena, aunque su precio fuera “pecar” un tanto.
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Hola a tod@s. Hola Fernando, je je, me sacaste una sonrisa cómplice con eso de "pecador". Muy bueno.
Tienes razón, en cuanto al tema auto-stop y esa querencia en algunas zonas de Francia en hacerlo. En concreto en el año 2.016, haciendo la etapa que me llevaria a Durfort-Lacapelette (quería hacer al día siguiente una etapa cortita hasta Moissac y conocerla bien), llovía bastante, pero nada que asustara a un gallego, y me llamó la atención que se me pararon dos coches para llevarme, pero por iniciativa de ellos, yo no estaba haciendo "dedo", je je, no quise ser "pecador" y amablemente rechacé la oferta.
Más tentaciones tuve en Sauvelade, pero en el 2.018, la etapa era, como tú muy bien dices, siguiendo a Gronze, Arthez-de-Bearn - Navarrenx, tenía en mis anotaciones, como buen agonías, que en Sauvelade había una Abadía y como punto intermedio, kilómetro arriba o abajo, venía bien para hacerme una paradita. Resultó una parada extra-larga. Una suerte de segunda parte del Diluvio Universal empezó a caer cuando estaba a punto de llegar a la Abadía y me refugié dentro, esperando a que pasara el "chaparrón". Entré y estaba solo y cuando salí eramos cerca de diez personas resguardándonos de la lluvia.
Apenas doscientos metros más adelante de la Abadía, había un Albergue, cuyo Hospitalero debió de enterarse que estábamos varias personas allí, se acercó en el coche solícito, brindándose a llevarnos a su Albergue o a Navarrens (hummmm, con las ganas que tenía yo de comerme una trucha allí). Bueno, quizás este feo que lo diga yo, pero se fueron todos al coche menos yo. Me había cambiado en el Abadía, (¡¡¡Dios perdone mi desnudez!!!, je je.) y no iba a ser un pecador, transgresor y todos los adjetivos calificativos al uso. Esperé a que amainara. Tres "horitas de na" estuve esperando a que escampara.
Cuando decidí que había que ponerse en marcha, apenas caía alguna gota y al pasar por el Albergue, allí estaba el Hospitalero advirtiéndome que el Camino estaría innundado, que no siguiera. La verdad no tenía pensado ir por el Camino, si de algo me alegré ese día fue tener la aplicación de wikiloc y encontré una ruta, eso sí, por carretera, que me llevó a Navarrens. En ese trayecto también se me paró un coche por si quería subir, se lo agradecí pero me negué y llegué a Navarrens, contento de no haber "pecado", eso sí, hambre canina y casi de noche.
Claro que hay algo que a mi me vino bien para no "caer en la tentación", yo no tenía ningún lazo. No hay nada más intenso que un lazo de sangre, ni nada más "entrañable" que dos hermanos caminando juntos, conociéndose, disfrutándose, esa circunstancia posibilita que el hecho de "pactar" los kilómetros, deje el tema en algo menos que en "pecado venial". No irás al Infierno Fernando, Santi lo entiende seguro. No vamos a ser más papistas que el Papa.
Bo Camiño.
Cómo que no irá al infierno? Por supuesto que irá. Tal vez Santi lo entienda y salga airoso en el juicio final, pero de la inquisición peregrina no le salva ninguna credencial rebosante de sellos ¡Arderá sin remisión!
Bromas aparte, da que pensar cuando enjuiciamos a la ligera al primero que vemos bajando de un taxi, bus o coche, con su mochila, cerca del albergue. Sin conocer la infinidad de causas que puedan justificarlo lo condenamos interiormente, cuando en realidad ¿Qué nos importa? Estropear un gran día por una visión y creencia probablemente errónea, que ni nos va, ni nos viene, y genera emociones negativas, no compensa. Be happy, my friend!
Antes que alguien pueda llegar a sugerir que las espaldas de los peregrinos menos cumplidores merecen ser flageladas por su escasa fuerza de voluntad, tal vez convenga recordar testimonios de quienes recorrieron las rutas en otras épocas. Si bien hoy en día tenemos en el pedestal que merecen a aquellos que no se suben al burro (ni al coche, ni a la bici eléctrica) y recorren la ruta en el coche de San Fernando, recordemos por ejemplo que el Codex Calixtinus (una referencia en su tiempo) establecía en menos de veinte días el recorrido desde la frontera francesa hasta Compostela. Como aún no habian inventado las carreras ironman, ni las barritas energéticas, podemos pensar (creo que en el propio texto así lo recomienda en algún punto) que sugería utilizar algún medio de locomoción, monturas o los carruajes que usaran entonces. Si pensamos en los personajes VIP de cada época que realizaron la peregrinación, probablemente no encontraremos muchos que lo hicieran a pie, fueran laicos o seglares. Seguramente bastante complicado era realizar el viaje como para cuestionarse si resultaba aceptable o no utilizar los medios disponibles para hacerlo más llevadero. Por supuesto, quien no disponía de esos medios no podía plantearse ninguna alternativa. Actualmente para muchos no se considera aceptable hacerlo así, sin embargo no seré yo quien lance piedra alguna, ni la primera ni la última, contra el que se suba a un carromato moderno en alguna ocasión. Por tanto, podeis pecar cuanto deseeis. Saludos.
Al hilo de lo que comentas, y siendo todo cierto, quien no disponía de esos medios estaba acostumbrado a pegarse panzadas de andar de sol a sol. No olvidemos que las legiones romanas, con impedimenta de alrededor de 30 kg recorrían unos 50 km por jornada de marcha, y creo que no llevaban ni suela vibram ni goretex. Cuando detenían la marcha, nada de ducha y cervecitas, ha montar el campamento, y en campaña, con empalizada de troncos incluida.
Eso sí que eran caminantes!! Un saludo
Impresionante estos romanos!! Interesante los relatos que habéis expuesto. Por mi parte para el siguiente camino que haga tengo planeado hacer muy poquitos kilómetros cada día y llevar la tienda de campaña. Voy a intentar saborear más el camino. Como bien dice Fernando es muy recomendable hacer noche en lugares emblemáticos pero yo me estoy empezando a plantear si no hacer 15+15 en vez de 30.
Claro que para hacerlo más lento requieres más días (y más dinero) pero bueno... hay decenas de lugares pequeñitos y apartados que bien se merecen mis atenciones.
:)
Me encanta este sano intercambio de opiniones y experiencias y viniendo de las voces de la sabiduría adquirida a golpe de pisadas, mejor aún. Esto de las largas jornadas yo lo viví con la trashumancia, "arreando" (así lo dicen los pastores en Extremadura) ovejas y cabras, desde las 6 de la mañana hasta las 10-11 de la mañana, también. A partir de esa hora el ganado ya no anda y hay que esperar hasta las 5-6 de la tarde en que se retomaba la ruta y la jornada terminaba sobre las 8-9 de la noche. Pero, claro, entonces yo tenía 18 y 19 años que fué el tiempo que viví esa experiencia, aunque mi padre y otros pastores ya iban por los 50 pasados. Ahora, cuando voy haciendo etapas del Camino pienso en aquellos momentos y me alegro de aquellos tiempos y de éstos. Gracias peregrinos. Un abrazo.
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A Penedo: si está jarreando y un coche me para para llevarme, uffa! La tentación sería demasiado fuerte, me temo...
A Papadopou: no sabía el "timing" del Codex, pero que me lo creo: los burros no se inventaron ayer.
A Indi: " magnis itineribus" que diría Cesar en la Guerra de las Galias: la rapidez de desplazamiento de la infantería de hecho era una de sus estrategias más eficaces.
A Berto: los últimos años varias veces he salido con una tienda de campaña en mis correrías, pero por H o por B ( peso, volumen, claustrofobia, espalda molida, vallas, mosquitos) nunca ha acabado de funcionar, aunque no desespero: hay atardeceres en medio de la naturaleza que bufffff son impagables (aunque siempre intuyes que la noche será " toledana").
A Juandu: ¡Qué chulo eso de la trashumancia! (parece...) otro estadio de la civilización... y no estoy seguro de si hemos ido para adelante o para atrás...
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Yo también me lo he creido, reconozco que no he acudido a la fuente original. Sin embargo hay referencias varias en las que detallan la ruta.
Por ejemplo:
http://www.caminosantiagoencadiz.org/index/CodexCalixtinus/LibroVCapII.html
Saludos.
Tienes toda la razón que no es oro todo lo que reluce, lo has descrito con bastante claridad. Peso, volumen, cansancio, esperar a que añochezca para acampar... son muchos pequeños peros. Perooo seguiremos intentandolo!! Jajajajaja
A falta de Camino por razones obvias, fui a caminar unos 170Km de una sección del Florida Trail. Acá no hay montañas pero sí muchísima arena que con casi 15 kilos de peso dificultan considerablemente el andar. No hay bares, no hay hoteles, noy hay gente y por ende hay que cargar con todo. Duro? sí, durísimo pero muy gratificante todo lo que se ve y se vive. Como dice arriba Fernando, los atardeceres (y amaneceres) son impagables.
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A Txetxa: Vaya! Podrías explayarte bastante más sobre ese "Florida trail"... ¿pasa por los cayos u otras zonas pantanosas? A mí de EEUU me atraería hacer "El camino real" o de las misiones franciscanas de California. Claro que una cosa es el concepto, y otra muy distinta la realidad de patearte un país cuyas dimensiones e idiosincrasia pueden dar vértigo.
Y ya puesto el chip americano, lo que realmente me hubiese gustado de siempre es haber atravesado los Andes de sur a norte, de Argentina a Colombia... en otra vida tendrá que ser...
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Olvidé comentarte lo del Camino Real que no es mucho pero sí importante: es un camino que atraviesa las grandes ciudades como San Diego, Los Angeles y San Francisco (no olvidar que entre estas hay más ciudades). La ruta original está completamente cubierta de pavimento en forma de rutas, freeways, etc. Si te interesa la historia de las misiones, mejor alquilar un coche ;-)
EE.UU. A mi me llaman, Los Montes Apalache, unos 3000 km de extremo a extremo. Pfff sólo pensarlo y me duele el cuerpo ya que la travesía es todo monte y montaña.. Pero me encantaría..
Hola Fernando y todos!
No has cometido ningún pecado. Con ese acto hiciste un sacrificio por alguien más a quien aprecias tanto.
Y esta declaración es perfecta para el caso: "bueno, uno no es peregrino por ser especialmente santo, sino precisamente porque tiene que redimir algún pecado, no?”
Confieso que no soy un practicante ferviente de ninguna religión específica.
Pero, al iniciar un Camino, me dirijo a la iglesia del pueblo o ciudad al comienzo y digo una oración livre por los que me protegen: que me permita hacer el Camino, solo y solo, con el fuerza de mis propias piernas.
¡Hasta ahora me han permitido! Gracias!!!
Saludos!!!
Hola nuevamente. El Florida Trail tiene unas 1400 millas (2240Km) que recorren todo el estado desde Big Cypress en los Everglades (suroeste) hasta la punta norte en Pensacola. Por razones climatológicas, la temporada es de enero a marzo y por lo general se hace de sur a norte aunque siempre está el que lo hace alrevés y no le importa morirse de calor una vez que llega a Big Cypress. Fuera de esa época, el calor es agobiante, los mosquitos te devoran, las tormentas son eléctricas y peligrosas y muchas zonas quedan inundadas.
Es un trail poco transitado porque no es conocido, porque da miedo (cocodrilos, mosquitos, osos, etc) y porque como mencioné más arriba, al no haber montañas se cree que es fácil y aburrido. Tengo más de 20 años viviendo acá y pensaba exactamente lo mismo porque a mí también me gustan las montañas y el frío para caminar pero este año tocó hacer tripa corazón y no solo no me arrepiento sino que me quedé con ganas de mucho más. Hice la sección de la pradera de Kissimmee, al sur de Orlando, una zona muy rural donde hay mucho ganado, horizontes interminables y hammocks que te protegen del sol. Los hammocks son grupos de robles y palmeras. En la foto también se ve la señal del camino, la 'llamarada naranja'.
El Appalachian Trail, de Georgia a Main con unos 3500Km, está hoy saturado de gente, lamentablemente. Un poco como el Francés que se derrumba por el peso de su propia gloria.
"... da miedo (cocodrilos, mosquitos, osos, etc)" . No me pienso quejar nunca más de las chinches si me las encuentro en un albergue.
jajaja. Yo prefiero todos los bichos de la Florida a las temibles chinches porque a esas ni el invierno las mata. Por suerte no me las crucé en ninguno de mis Caminos.
Sabía yo que no podía sino ser muy interesante lo que contaras de esa ruta por Florida...
Formidable, Txetxa! Inimaginables paisajes para sencillos peregrinos ibéricos como es mi caso.
Gracias.