Kun
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Variedad en el Camino de Madrid

¡Hola Peregrinos!

Acabo de realizar el pasado mes de Febrero el Camino de Madrid hasta Sahagún. Titulo "variedad" por que creo que tiene cuatro partes bien diferenciadas.

La primera etapa, callejear por Madrid, recomiendo que se haga en sábado ó domingo para disfrutar de una gran ciudad en silencio y por la alternativa de Puerta del Sol, Cortes, Ayuntamiento, Paseo de la Castellana. 

La segunda, preciosa, el paso de la Sierra de Guadarrama (recomiendo el albergue de Juventud de Las Dehesas, tres kms después de Cercedilla).

La tercera Segovia y sus pinares, donde es fácil divisar animales, como liebres, corzos y multitud de aves, incluidos buitres y águilas.

Y la cuarta la dura Meseta Castellana.

Decir que este Camino es "solitario", yo no ví a ningún peregrino en todo el recorrido, aunque en los albergues me decían que iba alguno por delante no llegue a coincidir. Una de las partes buenas de este Camino, para mí muy buena, es que casi todo el Camino es por pistas de tierra o senderos( diría que un 95%), una vez que sales del barrio de Fuencarral-Monte Carmelo, de repente estás en el monte y adiós asfalto.

Creo que es en general un camino duro, al que hay que llegar un poco preparado fisicamente, con al menos un mes de entrenamiento dos o tres días de caminatas a la semana con alguna de 20 a más km a la semana. Y digo esto por que si no estas en forma, es un Camino que se te puede atragantar física y mentalmente. El Camino está bien señalizado, no está demás llevar un GPS (recomiendo la app ORUXMAP) y bajarse los tracs de GRONZE. Mucha atención a la señalización de cruces en las larguísimas rectas de La Meseta, si tomas una errónea te puedes haces unos cuantos kms de más.

El paso de la Sierra de Guadarrama desde Cercedilla-Las Dehesas es una etapa dura, de montaña, con fuerte desnivel positivo-negativo, aunque es al cuarto día y las piernas ya van cogiendo ritmo. Luego la provincia de Segovia, donde pones a prueba los gemelos al hacer mucho kilómetros entre pinares con suelo muy arenoso, siendo con frecuencia como si fueras por la playa. Y para terminar la Meseta, con rectas interminables de kilómetros y kilómetros con pistas infinitas sin ningún árbol en 360º alrededor, donde pones a prueba tu resistencia mental. Aquí además suele hacer bastante viento, prueba de ello son los cientos de molinos aereogeneradores que han instalado, que los ves pequeñitos al fondo y luego pasas junto a estos "Gigantes" que diría Don Quijote.

Aunque yo lo he hecho en invierno y había algún albergue cerrado que a partir de Mayo ya están abiertos, la infraestructura es todavía escasa y las etapas a veces, por este motivo, son largas. Los albergues en general son buenos, algunos muy buenos, y baratos, 5-10€, pero olvidaros de la opción hostal-pensión-hotel, en la mayoría de los sitios está el albergue y nada más.

De los Caminos que he realizado, este creo que es diferente, al menos a los clásicos, Frances, Norte, Plata, Portugués. Este es un Camino, como he dicho antes, exigente para la piernas y sobre todo para la cabeza, pero a la vez muy gratificante por que pasas del contraste entre la gran ciudad, la pequeña provincia, los grandes cultivos totalmente mecanizados, los pinares y monte con su fauna y flora y sobre todo, que ahora está muy de moda, la España DESPOBLADA y sus amabilísimas gentes siempre dispuestas a ayudarte en todo. Atraviesas unos parajes y pueblos con una gran y transcendente historia, pero desgraciadamente casi olvidada. (Medina de Rioseco, Coca, Villalón, etc etc..

Desde luego yo recomiendo y animo a realizar este Camino de Madrid lleno de contrastes y donde he disfrutado mucho, incluso de la "soledad"

Saludos y ¡¡¡¡BUEN CAMINO PEREGRINO!!!!

Kun 

 

 

NoJa
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Muchas gracias por el relato muy claro del camino de Madrid.

Ojalá pudiera hacerlo una vez mas tarde...

Bruno Leonés
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Pues estoy de acuerdo con tus comentarios. Yo también he hecho este Camino. En tres ocasiones he salido de mi casa en Tres Cantos y llegado a Santiago sin saltar un solo metro y de un tirón. Dos veces he ido en primavera y una en otoño y siempre he encontrado pocos peregrinos, muy buena acogida en los albergues de los pueblos y, como bien dices, he comprobado que es un recorrido de alta exigencia, física y mental.

No lo recomendaría en absoluto para principiantes y menos principantes solitarios y sin experiencia de senderismo. Hay demasiados tramos vacíos, pocos puntos de aprovisionamiento y puntos de abastecimiento de agua muy espaciados. En verano, las largas rectas de vacío total sin un árbol y ni siquiera un poste a la vista tienen que ser durísimas. 

Con todo merece la pena recorrerlo, y mucho. Manzanares, Segovia, Santa María la Real, Coca, Medina de Rioseco, Villalón, Sahagún y los pequeños pueblos intermedios son lugares en los que acontecieron algunos de los hechos más trascendentes de la Historia de España. Puede que no pisemos un terreno por el que circularan muchos peregrinos medievales, esos venían de Europa en su mayoría y los españoles buscaban el Camino Francés lo antes posible. A pesar de todo la experiencia es de las que no se olvidan y en estos tiempos de masificación turística de algunos de los demás Caminos es una magnífica opción para los que quieren disfrutar de una peregrinación tranquila, exigente y realista.

Buen Camino 

Sofía
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De acuerdo con Bruno y Kun, es exigente, para mi fue extenuante, pero de cabeza más bien. Con el tiempo y en perspectiva lo recuerdo con más alegria, pues el Camino en si mismo no lo disfruté demasiado, me dejó muy sin energías. Mucha soledad y psicologicamente duro, lo hice hace bastante tiempo, había alojamientos acogida albergues  sin problema, por lo que todavía me pregunto porqué se me hizo tan duro ...... aunque tuve momentos "camino" imborrables que lo compensó.

alvaro_oro
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Me sumo a las palabras anteriores. Me gusta la buena señalización del camino y la tranquilidad que se puede disfrutar. En mi opinión, en función de la gente hay tres tipos de caminos: los masificados, los intermedios y los solitarios. La primera vez que peregriné hice el Francés desde Ponferrada y aunque lo disfruté mucho pensé que lo mejor sería menos masificación. Y desde entonces no lo he vuelto a pisar, centrándome en caminos de afluencia intermedia. En el de Madrid arriesgué mucho buscando ese punto "intermedio", ya que es totalmente solitario. No obstante, es un buen camino para reflexionar y hablar con lugareños. Sin duda me quedo con la etapa de Cercedilla a Segovia, una auténtica pasada.

Buen Camino.