El sitio está bien, pero es un ¡NO! por la indecente explotación a la que tienen sometidos los propietarios de este negocio a sus empleados (extranjeros todos por supuesto). Baste decir que 3 personas hacen cada día el trabajo de 5 y además deben turnarse entre sí para que sus compañeras puedan tener un día libre a la semana con lo cual, cuando una libra, sólo se quedan dos para cocinar la comida, la cena y las tapas, limpiar todo el albergue y las zonas comunes, servir en la terraza, en el restaurante y en el bar al mismo tiempo y, además, acoger e instalar a los peregrinos que van llegando. Así 6 días por semana de 11 ó 12 horas... Siento vergüenza ajena de ver cómo en la Europa del siglo XXI, más de tres siglos después de la abolición de la esclavitud, aún podemos ser testigos de estas situaciones tan injustas e inhumanas. Ojalá que toda la riqueza que consigan amasar estos desalmados, robando a sus empleados, se la tengan que gastar en médicos!!!