Mauricio Groeninck
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A causa de la masificación?

Los comerciantes ya no están tan gentiles como en años anteriores, las tapas ya no suelen ofrecerse con la copa, las ofertas de 'menú de peregrino' casi han desaparecido sobre todo en Compostela

David Rod
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Pues nada, no vuelvo por Galicia en eones.

Es más el día que haga el de la lana iré solo hasta Burgos y bye bye.

Yo en mi último camino vi mucho "timador" ,lo cual hace que vayas menos al bar, es una lastima porque pagan justos por pecadores.

Berto_kairos
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Sin duda es terrible. Más allá de los bares, que no los frecuento mucho, mi experiencia recogiendo la compostela la última vez fue decepcionante. Tanto el hombre de seguridad como los empleados. Estaba lloviendo a jarros y yo iba brutalmente cargado. El de seguridad no me dejó entrar para resguardarme hasta que no le enseñé el código de reserva y me pusiese la mascarilla, todo ello con una frialdad pasmosa. Los empleados de dentro tampoco fueron cordiales, más bien parecía que estaban allí únicamente para dispensar compostelas y que no les molestases. Quiero pensar que yo estaba cansado y cargué contra ellos, pero me temo que tampoco ellos estaban preparados para hacer bien su trabajo. ¿Quién contrata a las personas de seguridad? ¿Quién a los empleados? ¿Cuales son los requisitos? Mi experiencia es que fui tratado como ganado. Espero que alguien responsable pueda leer estas lineas porque al final todo se resume a las personas, si estas fallan entonces se acaba la magia... y el negocio.

Entiendo que ellos tienen mucho (muchisimo) trabajo y que tienen que tratar con personas muy variadas y no siempre de buen humor ni educadas. Yo tampoco siempre soy el más simpático ni el más cordial. Simplemente ha sido mi impresión subjetiva la última vez, tanto a la entrada de la Catedral como en la Oficina del Peregrino.

CristinaRB
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Sí Berto, terrible. Yo la compostela ni la pedí cuando vi el ambiente y llegar a la Catedral fue bastante decepcionante: trenecitos turísticos pitando para que se apartaran los peregrinos y mucho mogollón. Llegar a León o Burgos mucho mejor

ferjo
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Empezaba a pensar que el rarito soy yo, cuando hago un Camino o parte de él, procuro no terminar en Santiago, me sentía muy decepcionado al llegar ahí, ya sé que es la meta o para muchos así lo es, pero cuando ya tienes varias Compostela y ves que no sirve para nada, y además te encuentras con cientos de peregrinos en las colas que no sabes muy bien por donde han llegado cuyo único afán es poseerla, tu objetivo cambia.

Ya sé que muchos no estarán de acuerdo conmigo, pero no es necesario ir a una iglesia para poder conversar con Dios, del mismo modo no es necesario visitar al Santo si te sientes acompañado por Él.

Ultreia

CristinaRB
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Eso es

Navigator
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Buenos dias a todos:

Ya se ha comentado profusamente , tanto en Actualidad como en éste Foro,  que lo de las maletas y maletones unido a toda la demás parafernalia,  aparte de quitar esencia a todo el Camino,  desemboca inelectublamente en el Quo Vadis Camino Francés???

Pues,  que entre todos lo mataron y él solo se murió.  No en vano, vamos leyedo las experiencias de algunos ilustres caminantes de este Foro, y comprobamos que ya cambian de Camino ante la insoportable presión del Francés. Y no , no somos ni raros ni irrespetuosos, creo que solo conscientes.

Lo dicho,  un saludo para todos y Buen Camino a todos,  sea cual fuere el que elijais.

 

ARAMEO
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A la Xunta le da igual los cuatro frikiies del camino, el negocio son los turigrinos, por cuatro puristas que no se quieren mezclar con los de las maletas no van a cambiar naxa

MontseP
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Tengo la misma sensación que vosotros y ya las dos últimas veces ni fui a por la Compostela. Como tengo dos adorables amigos Peregrinos que viven en Santiago ya voy directamente a verles o vienen a buscarme poco antes de llegar. Lo del trenecito no lo he vivido pero en fin, es lo que hay. Mejor mirar para otra parte. De todas maneras todavía se puede sentir ese no sé qué en algunos lugares y momentos del Camino, o los caminos. Seguiremos andando, hollando senderos milenarios y buscando en el cielo la vía Láctea 

Berto_kairos
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Claro Montse!! Sigue existiendo ese no sé qué en muchísimos lugares incluso en Santiago!! Lo que pasa es que a mí me gusta tener mi compostela y tengo que pasar por el aro del mercadeo jajajaja La próxima vez nada más llegar a Santiago me voy al albergue y a disfrutar de la compañía de los peregrinos y de la ciudad. Y ya el día siguiente por la mañana me iré a por la compostela y a visitar la catedral, es posible que por la mañana les pille de mejor humor jajajaja

Ultreia!! :)

ARAMEO
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El ambiente peregrino lo viví yo anoche en el Albergue de Branca, éramos un peregrino italiano, una chica británica, yo y el Hospitalero que también ha hecho muchos caminos, la cena comunitaria era como estar con la familia y solo éramos cuatro nada más. 

Tranquilidad y paz, y trato cercano en muchos albergues y hasta Hodtels en el portugués 

Indi
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Bien traído el tema, otro más, a unir a las disyuntivas y entresijos del negocio jacobeo. 

No puedo estar más de acuerdo, y lo digo con tristeza.

Aunque se han mezclado varias "quejas", la primera de Mauricio sobre gentileza del personal del Camino, tapas y menús, creo que son el resultado y consecuencia del trasiego constante y festivalero del Camino Francés. El peregrino ha pasado a ser visto, por méritos propios, como un cliente más, un guiri, un turista, y el nuevo comerciante que se ha establecido ante la promesa de un buen negocio, no puede ser comparado con aquellos quienes ya se encontraban en el territorio, acostumbrados a sudar el jornal diario viendo y atendiendo al peregrino como lo que era: un peregrino, necesitado de unos mínimos vitales, que a su vez contribuía a la subsistencia de su negocio, la más de las veces el único del pueblo, que a su vez daba un servicio básico y necesario a los propios habitantes del lugar. Lo vemos en muchas provincias "vaciadas", alejadas de un Camino, donde ya no existen esos servicios; ni bar, ni misa, ni tienda, ni cuartel de la guardia civil...ni gente. Aquí ya solo impera el turismo y la promesa del euro fácil, la nueva religión, y todos, políticos, empresarios, especuladores profesionales...sobrevuelan en círculo prestos a lanzarse sobre el botín. El resto no importa.

La riqueza de lo sencillo, de lo auténtico, que aumenta el valor y beneficio espiritual necesario a todo peregrino, tenemos que ir a buscarlo a otros Caminos, porque en el Francés, sobre todo en su parte final, es un bien tan escaso ya que está en peligro de extinción. Aunque donde sobrevive es oro puro y garantía de que no todo está, ni estará, perdido, y por ello hay que seguir reivindicándolo.

Respecto a la guardia pretoriana catedralicia compostelana qué se puede añadir. Una vez más, bajo el paraguas de una supuesta "seguridad", a la que también la iglesia se ha doblegado (no sé si más para proteger sus propios bienes que la seguridad de sus clientes —nosotros—), los pretorianos a sueldo— sobre todo el del jefe de la empresa —se encargan de que el peregrino se sienta ¿seguro?. Yo más bien me siento vigilado, sospechoso, cohibido. Entrar a la catedral, a visitar el Pórtico de la Gloria, o a obtener la compostela en la oficina del peregrino es casi como querer pasar los bastones y la navaja suiza por el arco de seguridad de un aeropuerto, dan ganas de ponerse manos arriba a esperar un gesto benévolo que nos franquee el paso...prohibido tocar, prohibido apoyarse, prohibido hacer fotos, deposite su limosna aquí.

El voluntariado se ha demostrado la más eficaz herramienta de complicidad entre el ciudadano local y el visitante. La ilusión de los voluntarios, que se sienten útiles a la sociedad y se entregan con entusiasmo a la causa que les ha llevado a ser parte activa en ella, lo hemos visto en muchas ciudades, eventos y acontecimientos. Los peregrinos tenemos el mejor ejemplo en los hospitaleros voluntarios. No me cabe ninguna duda de que en Santiago habría cola para querer ser voluntaria/o a la puerta de la oficina del peregrino, o en su interior sellando credenciales, en las proximidades de la catedral... que atendieran, esta vez sí, con una sonrisa y buenas palabras a cuántos allí lleguen, pidan su ayuda, necesiten un consejo, una información, lo que sea. Los pretorianos seguirían allí, porqué no, pero podrían entregarse mejor a su misión en un segundo plano, quizá menos participativo, o coaccionador, como quiera interpretarse.

Que el empleado de turno nos estampe el sello de "cumplió la peregrinación" tras un seco interrogatorio que, visto lo visto, al parecer, cualquiera supera, también tiene su cosa. Igualico sería que un voluntario te recibiese con un "bienvenido peregrino, enhorabuena, ¿cómo te encuentras? ¿Qué tal ha sido tu Camino?" o algo parecido, previo al examen de la credencial y elogiar si es preciso la "proeza" realizada, porque para muchos lo es. La frialdad de ese momento en la actualidad hace que ya no haya vuelto tampoco por allí en los últimos dos Caminos, aunque, en realidad, creo que ya no iré nunca a más a por ella...la importante y emotiva para mi fue la primera. 

Ferjo, yo sí estoy plenamente contigo.

Santiago es un buen lugar de paso, muy aleccionador y necesario para continuar hacia el Finisterre y Muxía, final y principio del Camino.

En fin, perdonad el rollo, debe ser el calor que me ha calentado en exceso.

PD.- igual sí que hay voluntarios en Santiago haciendo esa labor y yo no me he dado cuenta, o están en temporada alta y por eso no los he visto.