Fernando Cristó...
Imagen de Fernando Cristóbal Otxandio

Zarzas en Ruesta

.

Para explicar la naturaleza del peregrinaje a Santiago, suelo leer por aquí o allí la expresión “no es exactamente un paseo por el parque”. Claro que hay partes del camino más domesticadas y partes más silvestres, y me ha alegrado esta semana pasada descubrir que por Aragón la vía sigue bastante silvestre.

Desde 1995 que no pasaba por Ruesta, y la verdad, lo he encontrado igual, lo cual mi cabeza no ha decidido todavía si es una crítica o un elogio. Y aquí me parece que me voy a meter en un jardín: ¿Se supone que este pueblo del sindicato CGT debía ser un ejemplo de viabilidad anarquista? Pues sigue exactamente con las mismas ruinas, las mismas zarzas, y el mismo discurso de proyecto que hace 26 años. Puedo imaginar todos los palos en las ruedas que provocan que un “proyecto” así no acabe de funcionar, pero ahora mismo lo que me sorprende es que en vez de deprimirme, Ruesta siga estimulando mi alegría. No sé si será ese aire aragonés tan vigoroso, o la potencialidad infinita de esas casas de piedra, o la vibración de verdad histórica tan poderosa que se palpa…

Es de esos lugares en que no hay peligro de “disneyzación” del Camino – lo cual es un descanso y sí, una alegría -, y sin embargo, creo que deberían aprovechar a su favor la internacionalización de la peregrinación. Hay muchos, pero muchos peregrinos de todo el mundo que ansían encontrar otras formas de ir por la vida, y bufffff! Ruesta tiene muchísimo que ofrecer.

No me voy a meter en bosques de pureza ideológica (que si Durruti y Montseny, que si el maquis y los embalses franquistas) pero da la casualidad de que llegué esta vez a Ruesta con un chico norteamericano y una mujer eslovena y entendían perfectamente las zarzas de las ideologías del siglo XX, y sin embargo, notaba en sus ojos igual alegría a la mía ante el potencial del lugar. Uauh! Es que se te ensancha el ánimo! Pero, por eso mismo, habría que dejarse de monsergas, analizar con honestidad por qué no acaba de arrancar el “proyecto”, y ponerse manos a la obra.

El aliento del camino podría hacer milagros allí. Las canciones de Labordeta que nos pusieron a la hora de la comida, también ayudan lo suyo. Y ya sé que no va a ser, pero si pusieran una vela a S.Juan de la Peña y una hucha para que todos los pecadores que no nos hemos dignado a subir hasta arriba nos redimiéramos echando allí un euro, seguro que les daba para restaurar la iglesia... "para hacer esta muralla... traiganme todas las manos"... wink.

.

Indi
Imagen de Indi

 Y con esto, Fernando, llegamos a la parte en la que si hubieras subido a San Juan hubieras conectado con tu esencia más mística, sí, pero hubieras pasado de largo la esencia más peregrina de Arrés y las espinas de las zarzas de Ruesta, que aun no siendo rosas, su belleza resplandece entre las ruinas.

Parece que has disfrutado este Camino, de los pocos sin riesgo de ser Disneyzado. La auténtica puerta de entrada a las emociones y sentimientos que nos aguardan.

Buen Camino!

EngelAbel
Imagen de EngelAbel

Pues sí Fernando.

A veces se utiliza esa expresión para ilustrar lo que ocurre en esa franja de penumbra de contornos muy difusos que separan los 100 km p'aquí (Compostela) de los 100 p'allá (que cada cual ponga su principio). En un sentido y en otro. Una "travesía" (llamémoslo así por el momento) de tal magnitud (de los cien p'allá) obviamente no es precisamente un paseo por el parque, en ninguno de los sentidos. Aunque sigan siendo otros "cien". Me ahorro apreciaciones (personales e intransferibles, pero siempre respetuosos y condescendientes) para los últimos "cien", ese último tramo de los distintos itinerarios que genera tantos temores y tantos reparos cuando tiene que ver con la Meteo o con el avituallamiento o el cobijo. Pero sí diré que cuando esa expresión se aplica a ellos en sentido positivo, se le aplica para hacer ver que la "cuesta abajo" no ha hecho más que empezar.

A Ruesta le ocurre lo mismo que a tantos otros lugares, magníficos y olvidados. Se caen a cachos. Se olvidan. Y poco más tarde (o mucho, pero sin remedio) desaparecen sus nombres y sus cuadraditos rojos de los mapas y solo se ven desde el aire, fotografías aéreas o imágenes de satélite. ¿Alguien recuerda Anielle?. Algún día me acordaré de uno des esos que no tuvieron tanta suerte. Suerte tiene Ruesta por el momento de estar en una de esas grandes Vías. Otros lo estuvieron y desaparecieron cuando los trazados empezaron a hacerse a golpe de tiralíneas. De esos, de entre ellos, otros, pocos muy pocos, en cambio vieron su renacer. Y como bien dices o intuyo que dices, fue su Ave Fénix la iniciativa popular y la buena voluntad de las IC (I de Instituciones), siempre que otros hagan. Pero la Cultura interesa poco y cuesta mucho mantenerla. Pontencial tiene, desde luego, Ruesta. No se si para ser "disneydizada" en ese sentido tan,... tan Disney. Pero estoy de acuerdo contigo en que la sacaría del olvido y del estado en el que está. Sí, "si las paredes hablarán",... Quizás no hablan pero vibran. Y somos muchos quienes hacemos los cinco sentidos; quizás entramos en resonancia con los ecos sordos de esos lugares. Somos "de a pie", pero son las iniciativas populares, las de los "de a pie" las que llegan más lejos si encuentran su canal. Siglas aparte el proyecto va para adelante, o eso parece.

Como siempre, Fernando, gran comentario.

No te preocupes por no haber podido pasar por el Viejo San Juan de la Peña. El Camino siempre da oportunidades para volver,... ¿Realmente un Camino se acaba?...

EngelAbel
Imagen de EngelAbel

Por cierto, cambiaste el título. Me agradaba más el primero. Las zarzas las tengo un poco en el rabillo del ojo.

Fernando Cristó...
Imagen de Fernando Cristóbal Otxandio

.

Ya, es lo que pasa con las zarzas wink! Es que el anterior título se le podía aplicar a un artículo sobre el Camino, a otro sobre jardinería, a otro sobre política internacional o a otro sobre astronomía cuántica - si eso existe -. La ambigüedad semántica tiene sus ventajas y sus inconvenientes...

En Ruesta estuve un buen rato de charleta con Indi, que tuvo la gentileza de acercarse a visitarme, y filosofamos y divagamos de lo lindo: creo que tú  también, Engelabel, habrías estado a gusto en esa salsa... ah, esas tardes de Camino...

.

Indi
Imagen de Indi

Se hizo corta la charleta por culpa de la caldereta de cordero, pero fue muy interesante ponerle cara, voz y expresión a alguien que se maneja con tanta sutileza y soltura por los recovecos del alma. Y qué mejor escenario que entre las ruinas de un mundo y los cimientos de otro.

EngelAbel hubiera estado en su salsa filosofando entre lo humano y lo divino, sí, jajaja.

Un abrazo

EngelAbel
Imagen de EngelAbel

Jajajajaja !!! Para la próxima !

Por entonces estaba por Zubiri "recolocándome" el cuerpo después de un par de "tramitos" y descensos criminales... 

Pero sí, no estaría nada mal...

Es por Peregrinos como vosotros que Ruesta vive y vivirá !

Abrazos a los dos !