Etapa 1: Santiago de Compostela - Negreira | Al Loro

Distancia: 
20,6 km
Duración: 
5 h 15 min
Dificultad: 
2
Paisaje: 
3

En el camino hacia Fisterra y Muxía podemos seguir utilizando la misma credencial con la que llegamos a Compostela, si bien disponemos de una credencial específica y gratuita que entregan en la Oficina de Acogida al Peregrino. Debéis dirigiros al despacho situado entrando a la izquierda, sin necesidad de hacer cola.

Etapa agradable y sin apenas dificultades, salvo la subida al Alto do Mar de Ovellas, donde deberemos ascender 210 metros en apenas 2 km; durante el resto del recorrido superaremos numerosos repechos, si bien son moderados, alternando tramos por pistas de asfalto con caminos de tierra.

Al ser una etapa relativamente corta algunos peregrinos deciden partir de Santiago al mediodía, después de asistir a la Misa del Peregrino, e incluso tras el almuerzo en la ciudad; por el contrario, los más madrugadores tal vez continúen la caminata hasta Vilaserío.

En el lugar de Sarela de Baixo, a 2,6 km del inicio, disfrutaremos de una bella panorámica de Santiago de Compostela, en cuyo skyline destacan las tres torres de la catedral.

Hasta el Alto do Vento, a 8,7 km de Santiago, no podemos confiar en encontrar ningún bar (en Quintáns hay uno, pero de horario incierto). En el Alto do Vento hay un mesón-restaurante que cierra los lunes; luego encontraremos bares en Ventosa, Lombao, Augapesada, Trasmonte y Ponte Maceira.

El punto más fotogénico de la jornada es el puente medieval de cinco arcos gracias al cual atravesaremos el caudaloso río Tambre. Este puente, escenario de una de las numerosas leyendas jacobeas, pervive como punto de paso obligado de peregrinos y viajeros desde hace más de ocho siglos.

Pasado el puente, a la derecha, se conservan en buen estado dos molinos hidráulicos de acceso libre, con sus piedras de moler. Hubo un tercero, de maquía (maquila, la parte de la harina que se pagaba al propietario por usarlo), justo antes del puente. Este último contaba con una vivienda encima, convertida hoy en un restaurante-cafetería.

En Barca, 1,8 km antes de Negreira y a pie de camino, está la Oficina de Turismo de Negreira (de 10:00 a 13:00, martes cerrada).

El albergue de la Xunta se encuentra a la salida de Negreira, a 1 km del centro y a 150 metros del camino; su capacidad es reducida, pero en los últimos años se han abierto varios albergues privados en el centro de la villa.

El edificio más interesante es el pazo do Cotón, de origen medieval, con almenas y una galería de piedra con tres arcos, bajo los cuales pasan tanto el Camiño Real como los coches.

Pasado el pazo, antes del puente, podemos admirar el Monumento o emigrante (1997), del escultor compostelano Fernando García Branco. La sobrecogedora imagen, en piedra y bronce, rinde homenaje a estas personas con perspectiva universal y a lo largo de la historia, en una escena desgarradora del abandono forzoso del hogar para poderlo alimentar.

En fechas próximas al Carnaval (Entroido en gallego) podremos degustar las filloas, un postre típico parecido a las crêpes; las hay para todos los gustos, desde las más tradicionales, con relleno a base de sangre de cerdo, a otras con miel o mermelada de fruta.