Etapa 10: Lunas - Saint-Gervais-sur-Mare | Recorrido

Desde la iglesia seguimos la ribera del Gravezon por una carreterilla sin tráfico. Bordeamos el Centro de Ocio de la Prade, con un par de áreas de recreo que poco servicio prestan a primera hora. De este modo llegaremos a la D8, por la que tras pasar bajo la vía del tren confluimos con la D35.

Después de cruzar el río en Le Pont d’Orb, se nos ofrece la posibilidad de desviarnos al centro de Le Bousquet d’Orb (650 m), siendo posible retornar al GR por el Chemin de Saint-Martin, directo hacia la iglesia (500 m).

Ascendemos hasta la iglesia de Saint-Martin, rodeada por la agrupación de casas antiguas que configuran el barrio del mismo nombre.

Desde la iglesia de Saint-Martin continuamos para bajar una rampa y volver a ascender por el barrio de La Séguinierie, con la tumba aislada de la familia Riviere-André al lado de la vía. En este lugar abundan las señales de fabricación casera.

Principia aquí una dura cuesta, hacia el primer monte del día, por un estrecho paso entre casas y muros de piedra que cierran las huertas. La pedregosa senda, a menudo encharcada, avanza entre castaños, robles y retamas por la ladera del angosto valle, tapizado por un frondoso bosque, regado por el arroyo Coutelou. Por momentos es preciso saltar, al modo de las cabras, de roca en roca, pasando primero por el Col des Courds y, poco después, por el Col des Pins.

3,6 Col des Pins. Un suave descenso, ahora por una pista forestal ancha, nos conduce a la encrucijada quíntuple del Col des Clares (590 m de altura), con dos mesas para descansar. Estamos totalmente rodeados de montañas y bosques de aprovechamiento maderero, ahora en el Foret Domaniele des Monts d’Orb, y los robles van dando paso a abetos y pinos de Oregón, algunos de hasta seis pisos de altura.

3,3 Col des Vignères. Desde sus 626 m, la montaña rusa se prolonga hasta el Col de Peyremale (681 m), dejando a mano derecha un estupendo observatorio ornitológico construido en madera que puede servirnos de refugio. A través de un robledal y del primer hayedo de la Vía de Arles, un tramo realmente espectacular, alcanzamos la encrucijada séxtuple del Col du Liourel (702 m), precedido de un montículo rocoso.

Por un altiplano avanzamos hasta el Col de Serviès (838 m), desde el que parte un camino descendente al pueblo homónimo.

4,8 Col de Serviès (desvío a Serviès). Durante un trecho el GR 653 coincidirá con el GR 71. El hayedo se extiende hasta el bosque de Rials, propiedad de la comunidad de montes del Haut-Dourdou, ya a 944 m de altura. En el límite con el departamento de Aveyron el camino se torna más pedregoso y sombrío al transitar entre los montes Redon, Ubac y Agut. Por un momento el bosque clarea y al sur divisamos hasta cuatro pueblos, continuando al frente en descenso hasta converger con la carretera D163 en el Col de la Font, y 400 m después con la misma vía que, ya en Aveyron, ha pasado a denominarse D52.

6,3 Col de Layrac. Desde los 765 m de altura de este puerto, giramos bruscamente al sur para regresar al Hérault, dejando partir al oeste el GR71. Una pista ancha desciende con decisión al valle: primero por una zona abierta, pasando por el Col de la Fontasse, más adelante entre robles y castaños, con escalones en la roca antes de alcanzar Mècle.

3,4 Mècle. Aldea agrupada, con fuente de agua potable y cruz con placa del Camin Romieu en la plaza.

Sobre asfalto cruzamos el río Narbounis para realizar un último ascenso por el pedregoso camino que conduce al Col de las Couchas.

Al igual que en la llegada a Le Barry, antes de descender a Saint-Gervais bordearemos el sitio arqueológico de Neyran, que domina el valle desde un agreste promontorio. Alcanzamos por fin la meta cruzando el Mare por un puente medieval, y luego a través del estirado casco urbano, alineado con el valle transversal del Casselouvre.