Etapa 5: Poggio Bustone - Rieti | Recorrido

Distancia: 
16,2 km
Duración: 
4 h 45 min
Dificultad: 
2
Paisaje: 
3

0,0

3,8 km

Desde la Piazza della Torre, junto a la iglesia de San Giovanni, toca descender en zigzag por diversas vías enlosadas, con la opción de atajar utilizando alguna escalera. Llegamos al fondo del barranco, donde una senda prosigue por el bosque permitiéndonos obtener magníficas vistas sobre Poggio Bustone.

El trayecto discurre por la ladera de las colinas que limitan la Valle Santa, ofreciéndonos continuos encuadres sobre la llanura reatina y sus lagos, ahora con la localidad de Borgo San Pietro en primer plano.

En una bifurcación el CSB ataja por la derecha, recorriendo 80 m para regresar al compartido con el de San Francesco. Por fin llegamos a una pista asfaltada y a las primeras casas dispersas, con sus olivares, que preceden a la aldea de San Liberato (área de descanso con fuente); su iglesia está ligeramente apartada del Camino.

3,8

2,0 km

Tras cruzar un regato vamos a la izquierda, entre casas, por un camino que sube con ganas hasta introducirse de nuevo en el bosque. Continuamos por él pisando una senda provista de rústicas barandas de madera.

Antes de contemplar Cantalice encontramos una fuente con pilón. Justo después ya descendemos por Via Fratelli Cairoli al tiempo que admiramos el pintoresco caserío medieval. En Cantalice di Basso los peregrinos suelen aprovechar sus servicios para avituallarse y reposar.

Desde la Piazza de la Repubblica comienza el fatigoso ascenso, por las tortuosas calles medievales, hasta la escalinata que nos deposita, figuradamente, en el mismo atrio de la basílica barroca de San Felice, excelente mirador sobre la villa y la Valle Santa.

5,8

3,3 km

Al pie de la rocca, de la que subsiste una torre cuadrada medieval, la Via del Castello nos lleva sin pérdida hasta la capilla de la Madonna della Pace. Pasamos por su trasera, y poco después existe un área de descanso.

Enseguida dejamos la SP 8 para desviarnos a la izquierda y seguir por una pista local que, con sus subidas y bajadas, pasa junto a la capilla de San Gregorio, acompañada por un pinar con área de descanso y fuente.

Entre prados y arboledas la pista, cada vez con un firme más degradado, nos permite contemplar el perímetro montuoso que circunda el valle, con Poggio Bustone ya lejano. La siguiente cita, al desembocar en otra carretera mayor (fuente con pilón), es el santuario de San Felice all’Acqua, que cuenta con un acogedor albergue de peregrinos anexo.

9,1

2,1 km

Un arcén peatonal, pintado de rojo, parece aportar cierta seguridad a quien transita por la estrecha carreterilla descendente. No obstante, muy pronto la dejamos a la izquierda para continuar por una pista de tierra y grava.

Cuando concluyen los edificios, el camino se va cerrando de vegetación que por momentos configura un túnel, bajando junto al B&B Il Rifugio nel Bosco. Llegamos a una carretera por la que continuamos a la izquierda, y enseguida se puede tomar el atajo que cruza un vado, o dar un rodeo hasta el puente de Torre Chiavellone.

Se asciende, utilizando un camino pedregoso que se abre paso entre árboles vetustos de grandes raíces, al convento de La Foresta, precedido de una fuente de manantial y de escalinata pétrea.

11,2

5,0 km

Tras haber visitado este santuario franciscano vamos rodeando su propiedad, acompañados por un Vía Crucis con sus estaciones representadas en cerámica. En lo alto no hemos de confundirnos con carteles engañosos, sino seguir la carretera a Rieti, que ha sido provista en 2024 de una senda paralela a su derecha.

A la vista de la Valle Santa, ahora con presencia de su ciudad rectora, justo antes del acceso a la Villa dell’Annunziata nos desviamos a la izquierda (no nos despistemos) por un camino herboso, luego senda entre matorrales y arbustos, que desciende hacia una vaguada. Ya como pista de tierra prosigue por el bosque hasta regresar a la carretera; 100 m después aparece el cartel de Rieti.

En la rotonda con la cruz sobre la bola del mundo, que recuerda el Año Santo del 2000, comienza el trayecto urbano por la Via Angelo Maria Ricci, que tras el cementerio va a la derecha entre altos pinos de copa y ante la Sabinas Universitas. Al fondo ya se divisa la torre de la catedral.

Dejamos a la derecha la capilla de la Madonna dell’Orto para cruzar la vía del tren y toparnos con la muralla medieval (supermercado Carrefour y farmacia). Conviene acceder al casco antiguo por la Porta Conca, la primera que encontramos, y de este modo rodeamos la cabecera gótica de la iglesia de Sant’Agostino hasta la plaza que precede a su fachada, donde se encuentra la histórica heladería, chocolatería (deliciosos bombones artesanales) y café Napoleone, muy recomendable.

A continuación, procede cruzar en diagonal la Piazza Guglielmo Oberdan (fuente), con la estatua sedente del romano Marco Terencio Varrón, eminente ciudadano reatino que destacó por sus aportaciones agronómicas. Por fin, a través de Via Ludovico Potenziani y Via Pennina, alcanzamos la Piazza Vittorio Emmanuele II (Ayuntamiento y Torre Cívica), que enlazando con la ajardinada Piazza Cesare Battisti nos permite llegar a la catedral.

16,2