Prato

Servicios:
Habitantes: 
200.725
Municipio: 
Prato
Provincia: 
Prato

Alojamientos en Prato

 
75+ €
 
105+ €
A 1,3 km de la catedral
 
102+ €
 
107+ €
Céntrico, a 400 m de la catedral
 
78+ €
 
98+ €
Céntrico, a 500 m de la catedral
 
111+ €
 
140+ €
Afueras, a 2,0 km de la catedral
 
81+ €
 
120+ €
A 900 m de la catedral
 
69+ €
 
89+ €
Céntrico, a 600 m de la catedral
 
54+ €
 
67+ €
A 900 m de la catedral
 
64+ €
 
75+ €
A la entrada, a 900 m de la catedral

Notas destacadas

Tres opciones para sellar: la catedral, pagando la entrada; en la oficina de turismo de la Piazza del Comune, hasta las 19:00; o en el quiosco de la Piazza del Duomo, el más bonito y con un horario más amplio.

Es una ciudad más industrial y menos turística que Firenze, y por lo tanto más barata. Para los peregrinos hay algunos restaurante concertados que ofrecen menú, así las pizzerías Il Coccodrillo (Piazza Mercatale, 13) o Maggie (Via Bologna, 326), o el restaurante A i Canto del Mercatale (Via Canto Marcatale, 56), también con comida para llevar. Especialidades locales en la Trattoria da Lapo (Piazza Mercatale, 141). Y algo más ligero, modelo street food italiano, en Messer Lampredoto (Via Mazzini, 4), que además de su especialidad hace panini, hamburguesas y trippa frita.

De sus numerosos monumentos cabe destacar el duomo de Santo Stefano, cuyo interior posee unos delicados murales de Filippo Lippi dignos de ver. Al exterior posee un púlpito, obra de Donatello y Michelozzo, desde el que se muestra a los fieles la reliquia de la sacra cintola de la Virgen.

En el centro de la Piazza del Duomo vemos la fontana del Pescatorello (s. XIX). No lejos de la catedral se yergue el castello dell’Imperatore, erigido en el s. XIII por Federico II. El arte contemporáneo tiene su cita en el Centro Luigi Pecci (Maurice Nio, 2016), cuyo futurista contenedor parece una nave espacial.

Tiene fama su mortadela, muy especiada y diversa de la más conocida de Bologna; se puede comer con bozza pratese, un pan sin sal. Otra especialidad son los sedani ripieni, apio relleno de carne de vaca, mortadela y queso. Y para acompañar el vino Carmignano, D.O.

Presume también la ciudad de sus pastelerías, con dulces típicos como los cantucci, que fueron inventados aquí (Antonio Mattei, es su santuario en Via Ricasoli, 20) y se toman mojados en vin santo dulce, sin olvidar las pesche di prato o los setteveli. ¡Azúcar!