El Camino de Santiago desde Saint Jean Pied de Port, agosto de 2009-10-11
Nombre:
Xavier Oliver
Cómo:
A pie
Cuándo:
Agosto de 2009-10-11
Experiencia:
La valoro muy positivamente. Desde el primer año que la empecé he hecho el camino solo y lo recomiendo, ya que nunca caminas solo y se conoce mucha gente con inquietudes parecidas a las tuyas, de nacionalidades diversas,... Cada persona tiene su propia motivación para hacer el camino. El primer año estuve caminando durante 20 días seguidos y me destrocé los pies con las ampollas, aún así después de tanto tiempo el camino se había convertido para mí en una forma de vida y meHaciendo el camino desde el inicio al final encuentras de todo. La primera etapa de Saint-Jean a Roncesvalles es durísima por la subida constante y la falta de entrenamiento, pero a medida que pasan los días el cuerpo se va acostumbrando y aguantas más. Otras etapas de montaña que encontré duras son el Alto del Perdón saliendo de Pamplona, la subida de los Montes de Oca en Burgos (aquí además encontré niebla), la bajada de la Cruz del Hierro a Molinaseca y la cuesta de La Faba subiendo al Cebreiro. Las etapas castellanas también son duras por otros motivos: la calor del mes de agosto, la falta de sombra por la escasez de árboles y la monotonía del paisaje.costó mucho tenerlo que dejar. Ni te cuento lo que me costó incorporarme a la vida rutinaria a mi vuelta a la ciudad. En años posteriores, me decepcionó un poco, sobre todo en Galicia ya que parece que el camino está pensado para el turismo, y también la masificación.
Dificultad:
Haciendo el camino desde el inicio al final encuentras de todo. La primera etapa de Saint-Jean a Roncesvalles es durísima por la subida constante y la falta de entrenamiento, pero a medida que pasan los días el cuerpo se va acostumbrando y aguantas más. Otras etapas de montaña que encontré duras son el Alto del Perdón saliendo de Pamplona, la subida de los Montes de Oca en Burgos (aquí además encontré niebla), la bajada de la Cruz del Hierro a Molinaseca y la cuesta de La Faba subiendo al Cebreiro. Las etapas castellanas también son duras por otros motivos: la calor del mes de agosto, la falta de sombra por la escasez de árboles y la monotonía del paisaje.
Señalización:
La señalización muy buena en general, no me perdí en ningún momento. Quizás donde me pareció mejor fué en Castilla-León, ya que a la entrada de cada población te indican los servicios que tienes disponibles. La entrada a Ponferrada fué confusa ya que había una bifurcación de caminos con sus respectivas flechas amarillas.
Albergues:
Hay albergues suficientes, además y debido a la masificación del camino también hay bastante oferta de albergues privados bien de precio. Donde encontré falta de plazas de albergues fué en Galicia pasado Cebreiro, los albergues que hay tienen pocas plazas y se llenan rápidamente. Aquí tuve que hacer alguna etapa larga debido a que no encontraba albergue.
Sugerencias a los futuros peregrinos:
Que se animen a hacer el camino y no tengan reparos a hacerlo solos, se conoce mucha gente y te lo pasas muy bien. Eso sí, adecuar el peso de la mochila con lo imprescindible, yo el primer año me dí cuenta que llevaba cosas que luego ni las utilicé. Llevar una guía o aplicación con los albergues disponibles en las etapas y hacer reserva en los que se pueda, si no te puedes llevar algún susto de no encontrar sitio. Importante, cuidarse los pies e hidratarlos cuando finalizas las etapas previene la aparición de ampollas. Llevar un kit de curas de ampollas no está mal, a veces es difícil encontrar una farmacia. Buen camino, ULTREIA!